Los leoneses en México: «Ha sido terrible, todo se ha movido, pero estamos bien»

Junto a su familia Mappy asegura haber vivido instantes «terribles». «La fuerza ha sido enorme», ha asegurado desde su domicilio a leonoticias. El epicentro del seismo se ha localizado en la unión de Puebla con Morelos y no ha habido tiempo para que sonaran las alarmas por esa cercanía.

«Sin las alarmas lo primero es que hemos sentido como todo se tambaleaba y después ya se han escuchado. La fuerza ha sido enorme», advierte.

En su casa, una vivienda unifamiliar situada en el sur de la ciudad y por lo tanto más cerca del epicentro, la sensanción ha sido la de un cubo de hielo agitado en el interior de un vaso. «En mi casa se cayó todo, macetas, vasos, todos los cajones se abrieron, todo salió por los aires. Como ejemplo puedo decir que tengo una colección de tazas que salieron disparadas de su lugar y rompieron las vitrinas de cristal que tenían», también ha remarcado.

Desde el momento del terremoto en la zona de la ciudad en la que se encuentra la vivienda de esta leonesa no hay luz, pero al menos los móviles y la permanencia de las conexiones a internet ha permitido que «el contacto pudiera ser más o menos fluido con los nuestros».

En México, según resalta Mappy, viven «un millar de familias con raíces leonesas, así que de inmediato a través de las redes sociales todos nos hemos puesto en contanto y de momento no sabemos que haya daños personales y parece que todos estamos bien».

A pie de calle la siuación que se vive ahora es no tanto de confusión, ha recordado, como de «trabajo para intentar recuperar a las personas que puedan estar en problemas. Hay colapso en la circulación porque todo el mundo está en la calle y lo primero ahora es ayudar a quien lo necesite».

«Cerca de mi casa no veo edificios derribados y lo único que ha colapsado es un supermercado tipo Mercadona, que aquí se llama Soriana, pero no conocemos las consecuencias de la caída», también ha recalcado.

Los próximos días serán clave para conocer el alcance real del suceso en un país acostumbrado a este tipo de situaciones. Precisamente este martes a las once de la mañana «se realizó un simulacro conmemorando el terremoto de 1985, un terremoto que también me tocó vivir y que fue realmente terrible».

Los padres de Mappy Ferreras nacieron en las localidades leonesas de Garrafe de Torío y Orzonaga y las visitas a León son rutinarias en una familia que «jamás olvida a la patria. Precisamente ahora tengo un hijo que está realizando el Camino de Santiago. Estamos muy vinculados con León y lo único que les pido es que ahora recen por nosotros».