Un leonés se embarca en la Ruta Inti para recorrer Marruecos: «Lo que menos te apetece es sacar el móvil»

Si hay una experiencia que te cambia la vida esa es viajar. Conocer mundo y adentrarte en nuevos paisajes, costumbres o situaciones es muy enriquecedor y se además conoces gente con la que compartir estos momentos, la experiencia se convierte en inolvidable.

Este es el caso del leonés Carlos Vidal que el año pasado participó en la expedición cultural Ruta Inti que recorrió la península de Yucatán entre el 23 de julio y el 19 de agosto. «Una experiencia chulísima, a veces dura, estuvimos enfermos en una condiciones que no son las más optimas pero disfruté y aprendí mucho. Guardo un gran recuerdo», explica este leonés.

Gracias a la hermana de su amigo conoció este proyecto que es heredero de la Ruta Quetzal, del mítico Miguel de la Quadra-Salcedo. «El año pasado me presente y me cogieron», explica.

Una experiencia muy enriquecedora que este año volverá a repetir. Vuelve a formar parte del grupo de jóvenes que estarán presentes en un nueva travesía. En esta ocasión toca adentrase en Marruecos.

Partirán el domingo 21 de julio, desde Andalucía hacia el norte de África, donde se desarrollará la primera mitad de la expedición, siendo Melilla el primer punto de contacto. Durante esta parte del periplo, visitará lugares como Fez, Azrou, el desierto de Merzouga, Aremd, el Toubkal (el pico más alto del norte de África); o el Valle del Atlas. Una de las partes más destacadas de este primer tramo serán los días de convivencia con comunidades locales Amazigh. Semanas más tarde, la expedición partirá hacia Canarias. Durante esta segunda etapa de la aventura recorrerá emplazamientos como la Orotava, el Teide, la Laguna y el Parque Nacional del Garajonay.

Carlos Vidal ya va prevenido de los que se va a encontrar, es lo que tiene repetir experiencia.

Sabe que dormirá en algún lugar que no será muy cómodo, que la ducha serán un lujo al igual que lavar la ropa y también sabe que pasará mucho calor.

Unas dificultades que se pasan desapercibidas entre tantos buenos momentos que se guardan en los recuerdos porque, «lo que menos te apetece es andar con el móvil, aprovechas el tiempo para conocer lo sitios y hablar con la gente», apunta este leonés que detalla que en estos programas «lo que más valoras es la gente, conoces personas muy originales que han hecho multitud de planes y que te inspiran».