León podría recibir 20.000 vacunas en una primera fase para sanitarios y residencias de ancianos

La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha explicado este martes que, a falta de conocer los detalles del proceso de vacunación que arrancará previsiblemente a principios de enero, los esfuerzos en la Comunidad se centran en los preparativos logísticos para no romper la cadena de frío de las dosis.

Y el esfuerzo logístico será tremento, pero «perfectamente asumible». Así lo entiende el catedrático César A. Chamorro Álvarez. Chamorro, catedrático de la Universidad de León, miembro de la Academia de Ciencias Veterinarias de Castilla y León y director del Instituto de investigación de Desarrollo Ganadero y Sanidad Animal (Indegsal), mantiene que «los tiempos serán determinantes, y permiten margen de maniobra».

«Estamos ante vacunas de última generación con unas especificaciones propias en lo que se refiere a las temperaturas, pero que se pueden manejar», remarca. La Universidad de León cuenta con contenedores habilitados para esas temperaturas, ahora las mismas tendrán que conservarse en espacios industriales, pero con una ventaja en la que se incide por parte de Chamorro.

«Siempre se destaca la problemática de conservar la vacuna a -80 grados, algo que es perfectamente asumible porque lo que no se suele conservar es que existe un periodo de conservación de cinco días [ver gráfico BBC] en los que la vacuna puede permanecer entre dos y ocho grados, la temperatura de un frigorífico normal«, recuerda este catedrático universitario.

En ese tiempo será clave el sistema de vacunación aprobado por la Junta y en el que podrían tener un papel determinante los 237 consultorios en el Área Sanitaria de León y 140 en el Área Sanitaria del Bierzo.

Sin embargo hasta que la vacuna llegue a toda la población diana se precisará de un tiempo «amplio» ya que la «inmunidad de rebaño» no llegará hasta el verano de 2021.

La previsión es que la Consejería de Sanidad vacune, en una primera fase, a unas 47.800 personas de centros de mayores y sociosanitarios, así como a 98.000 trabajadores sanitarios de primera línea y trabajadores de estas instituciones. De ese cupo a León le corresponderían unas 20.000 vacunas, aunque el dato aún es estimativo.

Esta primera fase se extenderá hasta marzo, por lo que las vacunas sobrantes serán para el siguiente grupo, el de mayores de 80 años.

La comunidad, según las previsiones de la Consejería de Sanidad, contará con 300.000 dosis de la vacuna de Pfizer, por ser la más avanzada, que requiere una congelación a menos 80 grados centígrados y la administración de dos dosis.