A. CUBILLAS
Lunes, 25 de junio 2018, 13:50
León se queda vieja y sin habitantes. Y lo hace a pasos agigantados. Si en el año 1971 presumía de contar con una población de 562.758 habitantes, a 1 de enero contabilizaba 466.030 habitantes.
Publicidad
Una pérdida de 96.728 ... habitantes que la sitúa a la cabeza en el ranking autonómico de pérdida y entre las provincias españolas con una mayor sangría poblacional.
Una realidad que se acentuó en el último año, cuando la provincia registró una pérdida de 4.297 personas, es decir, casi el doble de los habitantes que perdieron Valladolid (-2.652) y Salamanca (-2.406) que ocupan el segundo y tercer puesto del ranking. Otras, como Burgos o Palencia perdieron 1.497 y 1.180 habitantes, respectivamente.
Así se desprende de las cifras de población y migraciones que publica este lunes el Instituto Nacional de Estadística, que señala que en la última década la provincia leonesa ha perdido 27.900 personas, es decir, a casi el 6% de la población que tenía en el 2008 (493.938).
Una pérdida que se ha acentuado en los últimos años pero que viene siendo una tónica general desde hace décadas. Así, hace 40 años gozaba de 541.776 habitantes, es decir, 71.506 más que en la actualidad.
Una cifra que se desplomó hasta los 507.025 habitantes en tan sólo dos décadas y que llevo a que con el inicio del año 1999 León ya estuviese por debajo del medio millón de habitantes, situándose en los 499.735. Fue en el año 1999 cuando León bajó por primera vez de la barrera de los 50.000 habitantes hasta alcanzar este año los 470.214
Publicidad
Pérdida poblacional que preocupa ya de por sí sola pero que alarma si se tiene en cuenta la edad de los habitantes de una provincia que, año tras año, se envejece, hasta dibujar una pirámide invertida en la que la cúspide crece más que la base. Porque en León cada vez nacen menos niños y los jóvenes en cuanto pueden se van a otras provincias o comunidades.
Si en el año 1977 León contaba con 36.661 niños de entre 0 y 4 años, en 2008 descendía hasta los 13.824 y en la actualidad en ese rango de edad apenas alcanzan los 10.896 habitantes. Una tendencia que se repite en los últimos escalones de la pirámide de edad de la provincia.
Publicidad
Así por ejemplo, tan sólo la población de 20 años anotó un incremento poblacional en el último año en el tramo de 0 a 40 años. A partir de ahí se intercalan descenso con subidas, aunque en su mayoría mínimos hasta llegar a lo alto de la tabla.
Si en 2008 la población, León tenía 133 vecinos centenarios, en la actualidad esa cifra se sitúa en 234. Una realidad que se repite en la cúspide de la pirámide. Los leoneses de entre 90 y 99 años alcanzan los 9.456 mientras que una década atrás eran 5.020.
Publicidad
Cifras que constatan que León sufre una imparable perdida poblacional que se mantendrá durante los próximos años y décadas sino se revierte la situación de una provincia que, sin duda, peina canas.
Castilla y León contaba a 1 de enero de 2018 con 2.418.694 habitantes, lo que supone 17.172 menos que en la misma fecha de 2017, con una merma porcentual del 0,7 por ciento, lo que sitúa a la Comunidad a la cabeza autonómica en pérdida de población en términos absolutos y relativos. La población en España creció, por el contrario, en 132.263 habitantes, un 0,28 por ciento más, hasta un total de 46.659.302 residentes.
La Comunidad perdió habitantes sobre todo por el saldo vegetativo negativo (nacimientos menos defunciones) en 13.446 personas; así como por el saldo migratorio interior, con 5.878 habitantes a favor de otras autonomías, mientras que ganó población en el saldo migratorio con el extranjero, en concreto, 2.240 residentes.
Publicidad
El saldo migratorio interior hizo perder 5.878 habitantes a la Comunidad en favor de otros territorios de España, la segunda autonomías más afectada por este tránsito, por detrás solo de Andalucía, que tuvo una cifra negativa en 11.382 personas.
En concreto, en ese intercambio de flujos la más beneficiada en detrimento de Castilla y León fue Madrid, con un saldo a su favor de 3.727 habitantes; seguida a mucha distancia por el País Vasco, que sumó 395 residentes de la Comunidad; Galicia, 329; Aragón, 303; Cataluña, 255; Valencia, 259; Cantabria, 239; Baleares, 206; y Canarias, 202, entre otras. Las únicas autonomías con un saldo a favor de Castilla y León, fueron Extremadura, con 195; Castilla-La Mancha, 122; y Andalucía, 79.
Noticia Patrocinada
Un análisis más profundo del saldo migratorio exterior revela que la autonomía perdió a favor del extranjero 689 nacionales, pero ganó 2.929 foráneos. En concreto, los saldos exteriores negativos beneficiaron principalmente a la UE (sin España), con 2.452 menos a lo largo de 2017, con especial destino a Bulgaria (899), Rumanía (715) y Portugal (587). Por el contrario, la Comunidad ganó 561 habitantes de Marruecos; 1.212 de centro América y Caribe; 2.320 de Sudamérica, sobre todo de Colombia (848 y Venezuela (735), y 6632 de Asia.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.