León se queda sin San Juan y San Pedro: el Ayuntamiento de la capital toma la decisión de suspender las fiestas

La concejala ha indicado que la institución tiene como obligación proteger la salud y recuperar el bienestar de la ciudadanía, es por ello que «se han tomado y se tomarán todas las medidas que sean competencia de este Ayuntamiento para preservar la salud de la ciudadanía leonesa y para conseguir recuperar la actividad productiva de todos los sectores de nuestra ciudad, con un apoyo firme sobre aquellos sectores que sufran en mayor medida las consecuencias de esta pandemia».

En esta línea, Susana Travesí ha precisado que se trata de una situación «sin precedentes» la que se está viviendo el país, en la que las Fiestas de San Juan y San Pedro, tal y como están concebidas será imposible que se puedan desarrollar, porque las actividades masivas que son completamente incompatibles con la realidad que imponen las restricciones sanitarias. «La salud es lo primero y debemos hacer todo lo posible desde las instituciones para adoptar las medidas necesarias que contribuya a superar esta pandemia lo más rápido posible y a evitar la propagación del virus», ha añadido la edil.

Desde la Concejalía de Promoción Económica se ha trabajado desde primeros de año en la elaboración de un programa con grandes conciertos en la Explanada de la Junta, actividades en los barrios, en la Plaza Mayor, actividades tradicionales y novedades artísticas y culturales, que contribuyeran a revitalizar la ciudad, y sobre todo, que permitieran tener conformado el programa con antelación suficiente para promocionar nuestras fiestas en distintos mercados generadores de turismo para esas fechas. «La imposibilidad de contratación en tiempo y forma actualmente, por la paralización de los trámites administrativos debido al Estado de Alarma, ha obligado a la suspensión de eventos previstos para los próximos meses en todo el territorio nacional», ha recordado el consistorio en un comunicado.

Travesí apunta que la partida presupuestaria destinada a estas fiestas, 370.000, se destinará una parte a reforzar nuestras Fiestas Tradicionales y otra parte a un plan destinado a las principales actividades generadoras de empleo de la ciudad, el comercio y el turismo y la restauración.

En el año 1943, en que después de más de una década sin hacerlo, el Ayuntamiento tutela una programación oficial. A partir de 1944 los días festivos se van llenando de actividades paulatinamente, misa en la Capilla del Cristo de la Victoria, concurso de escaparates, fuegos artificiales, en 1945 gigantes y cabezudos que se traen de Valladolid, juegos, principalmente.

En 1947 cuando las fiestas comienzan su despegue: cabalgatas, danzas folclóricas, pregón, reina y damas, juegos deportivos, etc., o en 1949 se incorpora el concurso hípico, en 1959 el concurso de carrozas entre barrios, en 1971 el Recorrido Romántico.