León lleva a la calle la subida de salarios y exige «futuro e inversión» para la provincia

El Primero de Mayo se celebró en León con una manifestación no tan multitudinaria como en otras ocasiones, pero que congregó a diferentes colectivos sociales bajo el lema 'Subir salarios, bajar precios, repartir beneficios'.

Con sol y cerca de la veintena de grados, la marcha partía desde Gran Vía de San Marcos tras una traca que estallaba tres minutos después de las 12 de la mañana.

«Los trabajadores somos gente humilde, pero importante. No importa ser activo, pensionista o empresario, el Día del Trabajo no mira a nadie e invita a todos a compartirlo», reflexionaba el veterano sindicalista y nuevo presidente de la gestora de Comisiones Obreras en León. Ignacio Fernández reconoció que ahora «no cotiza al alza» el mundo del trabajo y pedía aprovechar estas ocasiones para «empujar» a que ocupe un papel central. «Vamos a reclamar salario, bajada de precios y reparto de beneficios y esto lo sentimos todos, de la epidemia al alma. Estos temas son compartibles por todos los leoneses».

La convocatoria llevaba a la calle demandas y logros de la clase trabajadora y nuevos retos en el plano de las conquistas sociales. En especial, el foco se puso en la situación económica que atraviesa la provincia de León. Enrique Reguero, secretario general de UGT León, exigía a los gobiernos de España y Castilla y León «futuro e inversión para la provincia» ante la situación «desagradable» que vive esta tierra convertida en «un vertedero y un estercolero» del que solo quedan molinos, palas y agua «para que otros vivan mejor».

Los sindicatos animaron a acudir a una marcha que reivindica el papel de los trabajadores y en el que no se mira a nadie y se invita a todo el mundo a compartirlo. «Es el momento de que seamos conscientes y de que la ciudadanía vuelva a la calle en más manifestaciones para pedir futuro para la clase trabajadora».

Poniendo en valor el «legado» obtenido en los últimos años -subida del SMI, pensiones o derogación de la reforma laboral-, los sindicatos también han puesto el foco en el gobierno de «derecha y extrema derecha» de Castilla y León «que no cree en nada, que no cree en el diálogo social y que ha minado acuerdos». Para esta situación han pedido «pararles los pies» en las municipales.

Con las elecciones del 28 de mayo en el horizonte, junto a los colectivos reivindicativos se sumó parte de la clase política de la ciudad, que llamaban también a participar en esta jornada. El alcalde de León pedía «estar y participar» a una ciudad como León para la que pide «iniciativa privada» que apueste por las empresas y crear empleo. Por su parte, el secretario general del PSOE de León ensalzaba la cita porque «todos los avances a nivel social y laboral han venido con reivindicaciones como la del Primero de Mayo».

A la marcha del 1 de mayo se sumaron partidos políticos y también plataformas de trabajadores como los de Zener, en pleno conflicto laboral, quienes exigían que se les escuche y que se cumpla el convenio. También colectivos sociales como los inmigrantes o el movimiento feminista acudieron a la cita por las calles de León.

La manifestación recorrió céntricas calles con ruido y proclamas que algunos miraban desde fuera y otros se animaban a sumarse a una cita que pone en valor las conquistas de la sociedad y reclamaba dignidad para los trabajadores leoneses.