León inicia la escalada de la tercera ola sin recuperarse de la segunda: «Parar esto en estas fechas ya es difícil»

¿La solución? No parece sencilla, pero Fernández pide «confinamiento inteligente» para evitar los contagios cuando las pruebas aún no pueden confirmar si es un caso positivo o no. «Esas palabras que tanto repite la consejera de Sanidad, el 'confinamiento inteligente' es lo único que nos puede ayudar», asegura el gerente de Atención Primaria en León.

Tampoco se puede predecir cuándo llegará el temido 'pico' de casos en esta tercera ola, ya que es algo «difícil de estimar» y José Pedro recuerda en este sentido que «hace una semana ya habíamos pasado y duplicado la tasa de positividad» y la tendencia sigue siendo creciente. El nivel de alerta de 'riesgo extremo' en León no ha bajado, a pesar de que si lo ha hecho la Incidencia Acumulada, pero la provincia no ha sido capaz de contener los datos por el periodo que se pide desde Sanidad.

Motivo por el cual ahora «parar esto es difícil en estas fechas» y lo único que piden desde Atención Primaria es «seguir apelando a la responsabilidad y evitar todo lo posible las salidas innecesarias».

Los contagios han comenzado a crecer y León ha diagnosticado en las jornadas del viernes y el sábado más de 250 casos positivos con incidencia activa en las últimas 24 horas. «Esta quincena vamos a seguir en ascenso» vaticina José Pedro Fernández, quien insiste en que «pronto se verá lo que hemos hecho bien y mal en las reuniones familiares y las comidas y cenas de Navidad».

Desde el inicio de la crisis la labor de todo el departamento de Atención Primaria ha sido muy complicada y aún lo sigue siendo. José Pedro Fernández agradece a todo el equipo su compromiso y dedicación, pero manifiesta que es muy «complicado». «Somos como unas compuertas en el mar, es imposible mantenerlas cerradas, pero hacemos todo lo que podemos», asegura el gerente leonés. Una batalla que luchan día a día y en algunos casos con «impotencia».

Cuando hay «alguna fuga» o la situación parece que se complica «vamos con todo» para intentar frenarlo y saber que pasa. Buena muestra de ello son los cribados masivos que se han llevado a cabo en la provincia en varias Zonas Básicas de Salud. «Lo que te duele es que hay gente a la que parece que todo esto no le importa nada, que no va con ellos», lamenta Fernández, aunque agradece que «son los menos».

«La fuerza de Primaria es enorme» y aún así el Hospital de León no ha podido reducir los ingresos lo deseado para enfrentarse a esta tercera ola de la covid-19. La ocupación en planta y en UCI no está en los valores deseados y es «el reflejo de todo lo que hay detrás».

Con la firme idea de que la sociedad puede responder con responsabilidad, José Pedro Fernández espera que «ojalá podamos decapitar esto antes de que llegue febrero, pero será complicado».

«Estamos iniciando una tercera ola que se ubica en la cresta de la segunda». La frase la pronunció esta semana el epidemiólogo y exdirectivo de la Organización Mundial de la Salud Daniel López Acuña, pero en realidad es un mantra que lleva repitiéndose días entre los expertos del Ministerio de Sanidad y entre la mayoría de las consejerías de Salud.

Y es que las últimas estadísticas de Sanidad dejan claro que España se está asomando ya a una nueva embestida de la pandemia y que lo va a hacer en una situación mucho más delicada que cuando en septiembre pasado empezó a escalar la segunda oleada.

El año ha acabado con unas cifras y unos indicadores inquietantes que, sin embargo -avisan desde Sanidad- todavía no reflejan el posible boom de casos provocados por el 'efecto Navidad' que las administraciones esperan ver en las estadísticas a partir del martes de esta semana, dos semanas después del inicio de las vacaciones y con un tiempo suficiente para que entren en las tablas los retrasos en las notificaciones por los días festivos en los que se han realizado menos test de los habituales.

Las perspectivas no son buenas, admiten en el departamento que todavía dirige Salvador Illa, pero igualmente preocupante es la situación actual del sistema, que se encuentra en un momento de «fatiga continuada» al tener que enfrentarse a esa tercera oleada sin haber logrado aplanar del todo la segunda. De hecho, oficialmente España no logró salir ni siquiera de la situación de «riesgo alto» cuando el 10 de diciembre la segunda ola tocó suelo con tan 'solo' 118 casos de incidencia acumulada por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días. El momento de menor incidencia de la primera se consiguió el 25 de junio de 2020 con una tasa de únicamente 7,7, aunque entonces se realizaban muchas menos pruebas.