León, la estación imposible

Su configuración como estación terminal hace que tenga un andén cabecera y tres andenes más, dos laterales y uno central que nacen de ella. Los tres tienen longitudes diferentes: 190 metros el situado más al oeste, 485 metros el central y 236 metros para el último. A dichos andenes acceden cuatro vías, existen otras cuatro vías más de maniobras.

Inicialmente fue concebida como una estación de 'fondo de saco' y los recortes económicos han llevado a que su 'modernización' se limite a un 'brazo abierto hacia el oeste' con el fin de cubrir sendas escaleras metálicas de acceso a la zona inferior, un soterramiento de quinientos metros para el paso de trenes (muy lejos de los casi cinco kilómetros previstos inicialmente).

Ahora los leoneses asumen con resignación que la principal estación de Adif en la provincia, siendo provisional, se ha convertido en definitiva. Y no hay muchos precedentes de este tipo. Logroño demolió la suya, Vigo lo hará en breve y las temporales de León y Valencia han quedado como definitivas, pero sin incluir a los autobuses.

Gijón protesta ahora por conseguir que una estación provisional no se convierta en definitiva. Su exponente más cercano es León y las sensaciones no son las mejores.

La estación tenía un perfil cien por cien provisional pero finalmente se amplió y se construyó un andén pasante para permitir las circulaciones directas hacia Asturias y Galicia sin retrocesos y ampliar la línea de alta velocidad Valladolid-Palencia-León hacia La Robla y de allí a Asturias por la nueva variante de Pajares. La estación está ubicada junto a la prolongación de la avenida Ordoño II y a escasos metros de la antigua estación.

En Valencia ha ocurrido otro tanto de lo mismo con la estación provisional Joaquín Sorolla. Mientras preparaban todo el entramado del AVE en la ciudad del Turia hicieron esa estación como temporal, pero actualmente ya es definitiva. Está a 200 metros de la estación de Valencia Nort, que tendría que ser la estación permanente después de hacer todas las obras de integración ferroviaria allí planeadas.

La estación provisional de Logroño hizo honor a su nombre y se demolió en cuanto entró en servicio la estación intermodal de la que disfrutan actualmente los habitantes de la capital riojana y quienes les visitan en tren.

En Vigo el edificio de viajeros provisional de Urzáiz ya tiene fecha de caducidad. Se derribará cuando se produzca el traslado de las dependencias existentes en él a la ubicación definitiva en el interior de Vialia.

La situación a nivel general no avala lo sucedido en León, que tendrá que conformarse con una estación provisional convertida en definitiva.