El jueves, tras el consejo de gobierno, la Junta de Castilla y León informará de nuevas medidas restrictivas para frenar el avance de la quinta ola en la comunidad.
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Así lo ha adelantado la consejera de Sanidad, Verónica Casado, quien sigue viendo en el ... ocio nocturno el principal foco de contagio para una incidencia entre los jóvenes leoneses que supera los 2.500 casos por cada 100.000 habitantes.
La Junta ha pedido evitar los actos masivos con consumo de alcohol y ha recordado que «nadie, por muy joven que sea o muy vacunado que esté, está en riesgo cero».
Casado no ha concretado las medidas que se tomarán el jueves, pero sí ha puesto sobre la mesa la batería de propuestas que el comité de expertos está valorando aplicar.
Entre todas ellas se sitúa el toque de queda, que quede limitado a los municipios con mayor incidencia, tal y como ha aplicado la Comunidad Valenciana. «Se podría dar el caso. Estamos en análisis y debate. Se está analizando el toque de queda, la diferencia estará en términos temporales, geográficos o proporcionales, es decir, el impacto hospitalario y la incidencia. El toque de queda es una buena medida», ha insistido la consejera.
Desde Sanidad no se ha hecho aún una valoración del impacto que están teniendo las restricciones al ocio nocturno de la última semana. Eso sí, Casado pide los cuerpos de seguridad que pongan el foco en el control del botellón, una de las actividades que se siguen desarrollando y que generan un importante foco de infecciones.
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Sobre un posible cambio de nivel de riesgo, y que toda la comunidad pase a nivel 2, la Consejería valora llevar a esa fase a las provincias con mayores incidencias -siendo Burgos y Zamora las que peor se encuentran-, pero limitando las medidas: no se tocaría el consumo en terraza que incluso podría subirse hasta el 100 por 100 de ocupación para facilitar la actividad en la vía pública. «No será un dos total porque en determinadas zonas no hay que valorarlo. Se valorará el cierre del ocio nocturno y un toque de queda por municipios».
Verónica Casado ha tratado de explicar las causas del incremento exponencial de la pandemia que Castilla y León, especialmente entre los jóvenes, a pesar de ser una de las franjas de edad menos significativas de su pirámide de población.
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«Se explica por el contacto social y la movilidad. La primera ola con cierre de universidades y colegios, y las provincias cercanas a Madrid afectadas. En la siguiente ha sido por las no fiestas y hubo una siembra total en la comunidad; y luego movilidad tras nnavidad. En este caso son múltiples celebraciones que afectan a jóvenes por ser los que más contacto estrecho tienen, a las tres semanas de la Ebau, y las fiestas nocturnas también influyen», ha señalado.
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