La Junta de Castilla y León ha anunciado este lunes a los representantes de los hosteleros de la comunidad que el próximo día 3 de diciembre reorientará las medidas restrictivas en las que se está apoyando para luchar contra la incidencia del coronavirus.
Publicidad
Noticia Relacionada
En esa jornada se analizarán los datos de incidencia acumulada y en aquellas provincias en las que esta sea menor a 400 casos por 100.000 habitantes en los últimos catorce días o de 200 en los últimos siete, la hostelería podrá reabrir. En aquellas que no se haya logrado reducir la expansión del virus por debajo de ese umbral, se mantendrá la situación actual con los locales clausurados.
Esto implica también la adopción de cierres perimetrales por provincias, ya que el Gobierno regional no permitirá los desplazamientos entre provincias con distintos niveles de alerta.
«Cuando descendamos por debajo de los 400 casos por debajo de los 100.000 habitantes se retirarán esas restricciones», ha asegurado Francisco Igea.
En virtud de esta nueva forma de actuar, fuentes de la Junta creen que las candidatas mejor posicionadas para ver cómo su establecimientos hosteleros vuelven a la actividad son Segovia y Ávila, ya que son en las que los indicadores de riesgo presentan mejor cara pese a que a día de hoy las nueve provincias de Castilla y León permanecen en nivel 4 de alerta.
Así pues, los cuatro niveles se mantendrán como guía de esta nueva desescalada, por lo que en cada provincia se aplicarán unas u otras restricciones en función de la evolución de indicadores como la incidencia acumulada, la tasa de positividad de las pruebas realizadas o la trazabilidad de los contagios.
Publicidad
Inicialmente los hosteleros abandonaron la reunión envueltos en la decepción y francamente disgustados con el posionamiento de la Junta. Así aseguraron que la Junta no contaba con abrir sus establecimientos el puente de diciembre -del 4 al 8 de diciembre-.
En esas fechas, y según los participantes en la reunión, no tenían previsto decretar la reapertura de bares y restaurantes cuando se acabe la prórroga del cierre actual, vigente hasta el 3 de diciembre un extremo que la propia Junta ha matizado con posterioridad.
Publicidad
Fuentes de la Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León se mostraron «de ningún modo satisfechos» a pesar de abordarse las medidas a tomar con intención de reabrir el sector el próximo día 4 de diciembre, una vez finalice el periodo de cierre actual. «No se ha llegado a ningún acuerdo con el Ejecutivo. En el momento actual no hay fecha de apertura definida, pues está estará supeditada a la mejoría de la cifra de contagios», explicó la patronal.
Los hosteleros acudían a la cita convencidos de una propuesta de desescalada y han recibido «todo lo contrario». «Ni se les pasa por la cabeza abrir«, ha comentado el empresario, quien ha informado de que la Junta ha pedido al los representantes del sector que hagan un plan con las ayudas económicas para ser estudiado como consecuencia de la pandemia.
Publicidad
El vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, explicó a los hosteleros, en el marco de una reunión telemática mantenida este lunes, que los datos son los que mandan
.
La Junta ha responsabilizado al Gobierno central de la falta de apoyo para ofrecer ayudas económicas a las empresas durante la reunión y ha pedido a la patronal que redacte un plan con sus necesidades económicas, para estudiarlo.
En este sentido, Blasco ha informado que «mañana mismo» remitirán este informe, que incluirá, entre otras reivindicaciones, ayudas directas de entre 14.000 y 15.000 euros por negocio y de 500 euros al mes para cada empleado, aunque consideran este objetivo «muy difícil».
Por su parte, los hosteleros han trasmitido a la Junta su principal queja: la «farragosa» burocracia a la que están sometidas las ayudas del Gobierno autonómico y que hacen que estas se demoren mucho en el tiempo hasta llegar al bolsillo de los empresarios.
«A día de hoy, la Junta no ha soltado ni un euro», ha criticado Blasco, quien ha señalado que los consejeros han respondido a este extremo haciendo referencia a la normativa y a que «hay que cumplir la ley» y los mecanismos establecidos.
Por último, el presidente de la Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León ha resumido la posición de la Junta hacia el sector con la siguiente frase: «Estoy contigo pero no te puedo ayudar» y sus perspectivas sobre la pandemia como «todo nefasto y todo negativo».
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.