La Inmaculada se 'ronda' al ritmo de la Tuna

Con flores, a la Virgen. Así han querido homenajear las tunas leonesas a sus fallecidos en la víspera de la fiesta de la Inmaculada, una celebración que ni la lluvia ni el viento han podido empañar. Las agrupaciones musicales universitarias de la ULE han querido continuar con esta tradición de las tunas sevillanas, que cada año rondan a la Virgen en su fiesta, y debido al mal tiempo lo han hecho a cubierto, con la esperanza de poder salir, esta vez sí, el próximo año.

La parroquia de Nuestra Madre del Buen Suceso ha sido el escenario elegido para rendir tributo a todos los tunos leoneses fallecidos, así como para un homenaje floral a la virgen de la Inmaculada, que se ha celebrado en el interior del templo ante la imposibilidad de realizarlo en la plaza.

Tras la misa, y al ritmo del himno de León, los cerca de 40 miembros de la agrupación musical, en su mayoría representantes de la tuna masculina aunque con algunas de la femenina, el grupo ha rendido un sentido homenaje a la Inmaculada, a quien además de rendirle una capa y un adorno de flores, han querido deleitar con algunas de las canciones más tradicionales.

Clavelitos, Llorarán las estrellas, Compostelana o Las Cintas de mi Capa han sido algunas de las piezas que han sido interpretadas en el interior de la iglesia. Una celebración breve, emotiva y dejando pie a volver el próximo año, eso sí, en esa ocasión esperan poder rondar a la Virgen en el exterior.

La ronda a la Inmaculada se trata, según explican desde la organización, de una tradición que se viene realizando en Sevilla desde 1952, cuando la Tuna de Peritos Industriales, tomó la iniciativa de cantar ante los pies del monumento a la Inmaculada, y que ahora también es secundada por la Tuna de la Universidad de León.

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