Stop caídas. De esta forma, el Ayuntamiento de León anunciaba hace un año la aplicación del tratamiento antideslizante en la Calle Ancha para eliminar los riegos de accidentes por caídas provocadas por las características del firme.
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Doce meses después, la lluvia, el hielo ... o la nieve vuelven a hacer que transitar por esta vía sea un auténtico deporte de riesgo a pesar del desembolso de una partida de 21.500 euros.
Las baldosas amarillas se convierten en una trampa para los viandantes y los resbalones y caídas se suceden estos días. Un asunto que el equipo de gobierno ya ha puesto en manos de su equipo técnico que, a través de un informe, determinarán la eficacia del tratamiento deslizante y las medidas necesarias a tomar.
Así lo ha señalado el portavoz Fernando Salguero, que ha asegurado que «se está revisando su tratamiento para comprobar su eficacia. Posteriormente y con el informe técnico en la mano, se tomarán las medidas necesarias», señaló el popular.
Una situación que, tal y como han denunciado varios viandantes, se repite en otros puntos de la ciudad, como en la plaza de Santo Martino, junto a San Isidoro. Sin embargo, de momento ni hay solución ni se la espera. Así que hasta entonces, los vecinos se aferran a la precaución para evitar las caídas.
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