Secciones
Servicios
Destacamos
Laura Negro
Viernes, 19 de abril 2024, 20:33
El 20 de octubre es una fecha que el doctor Manuel Fernández nunca olvidará. Es la fecha de su «segundo cumpleaños», porque aquel día, «volvió a nacer.
Este médico leonés, jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Complejo Asistencial Universitario de León, fue ... víctima, en Arroyo de la Encomienda, de un fatal atropello minutos antes de recibir un premio honorífico en reconocimiento a su labor con ADECyL, la Asociación de Escoliosis de Castilla y León. Peter, un taxista de origen rumano sufrió un desvanecimiento, que le hizo perder el control del vehículo, subiéndose a la acera y arroyando al doctor. Éste resultó herido de gravedad con politraumatismo, sobre todo en una de sus piernas. Peter, el taxista, perdió la vida.
Los premios se suspendieron de forma inmediata pero ayer viernes, seis meses después, se celebraron por todo lo alto. Fue una gala para «agradecer y honrar a la vida». Una ceremonia a la que el doctor Fernández acudió emocionado. Todo eran felicitaciones y buenos deseos para él. Atrás dejaba meses de dura rehabilitación para pasar a recibir un caluroso y sentido aplauso por parte del público, muchos eran sus pacientes y también compañeros de profesión. Abrumado por las muestras de cariño, este cirujano vocacional, afirmaba tener «sentimientos encontrados» al regresar a Arroyo. En declaraciones a El Norte, explicó lo «tediosos y duros» que fueron sus primeros días en la UCI tras la cirugía. «La silla de ruedas, las muletas, la rehabilitación… pero eso forma parte del pasado y ahora toca mirar hacia el futuro», dijo con optimismo.
Hace dos semanas que se incorporó a su puesto de trabajo. Lo ha hecho «poco a poco» y «para probarse a sí mismo». «En las cirugías hay que pasar mucho tiempo de pie y las piernas todavía se me cansan. Volver hoy aquí ha sido una gran satisfacción, porque ésta es una asociación de valientes, a muchos de los cuales he tratado y operado», apuntó.
Mientras recibía el premio recordó con entereza aquella mañana de «su segundo cumpleaños». «El accidente fue muy serio, pero lo supera la alegría de estar hoy aquí y de recibir este premio que es mérito de todos los compañeros de equipo», afirmó. Tuvo también palabras de gratitud, cariño y reconocimiento hacia su mujer porque «gran parte del mérito de que hoy yo esté aquí, es de ella, ya que me ha cuidado de una forma increíble». Fue Carlos Pollán, presidente de las Cortes de Castilla y León, quien le entegó el galardón. Aquel día para él también fue muy complicado encontrarse con el accidente casi en directo. Al verse, los dos, se fundieron en un abrazo.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.