No son un sector tan potente como el de la hostelería o el turismo y por ello su voz ha quedado en un segundo plano, a pesar de ser uno de los sectores que más está siendo castigado por la pandemia.
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Los gimnasios y centros ... deportivos de León ha pedido auxilio ante una situación «crítica» que les ha llevado a perder hasta un 70% de sus ingresos por los reiterados cierres que han tenido que afrontar en los últimos diez meses.
La CEOE, junto a la Fele, han mantenido un encuentro con los representantes de este sector para analizar su situación. Santiago Aparicio, presidente de la Cecale, ha exigido a la Junta de Castilla y León un plan de choque con inyección directa de liquidez que permita a estos centros «sobrevivir» y evitar «la desgracia de que desaparezca una gran mayoría».
Se estima que, de no recibir ayudas antes del mes de marzo, la mitad de las empresas deportivas de la provincia podrían echar el cierre. «Si nos deciden cerrar injustificadamente tienen que darnos ayudas, no abrir y cerrar como un interruptor. En el momento que nos cierran dos días nos hunden un mes entero. No nos pueden ayudar con 1.000 o 3.000 euros, cuando con eso no pagamos ni la factura de la luz de un mes; tenemos pérdidas del 70%, son miles de euros cada mes, y no queremos limosnas sino ayudas potentes y reales, y más cuando no deberíamos estar ni cerrados porque no somos el problema y sí parte de la solución».
Según diferentes estadísticas, desde el inicio de la pandemia, apenas el 0,22% de los contagios han tenido su origen en los gimnasios. «En una clase de pilates de seis personas había acudido una infectada; tras hacer test al resto de participantes no se arrojó ningún caso más», explica Pedro Fernández, representante del sector en León. «Nadie se quita la mascarilla y se está constantemente limpiando y los usuarios desinfectando cada utensilio y zona».
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Por su parte, Mario Centeno, de Padel Park León, insistía en la necesidad de tener abiertos los centros deportivos como espacios de salud en un momento donde el ejercicio físico es vital para afrontar una crisis sanitaria. «Tenemos márgenes muy reducidos. Hemos estado abiertos menos de seis meses en 2020 y la mayoría somos pymes o emprendedores. Esto nos hace aún más sensibles a aperturas y cierres». Y todo ello a pesar de contar con una ratio de ocupación de 90 usuarios por centro.
Desde la Fele, Javier Cepedano ha solicitado a las administraciones que cuando se produzca un cierre dictaminado «tiene que haber una ayuda directa a ese sector. No es un cierre por capricho». Y es que, el presidente de la patronal leonesa considera que los gimnasios tienen «la espada de Damocles de todos los problemas» cuando hay otros sectores que están siendo más determinantes para los contagios.
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Por todo ello, empresarios del sector solicitan ayudas directas y un plan de choque bien encauzado para que puedan mantener la actividad cuando la Junta les permita reabrir sus negocios.
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