Fogones de solidaridad

Cuando los fogones del Restaurante Pablo se apagan, se encienden los de la solidaridad. O al menos eso es lo que ha pretendido este miércoles Juanjo Losada, chef del Restaurante Pablo que ha elaborado un menú con estrella Michelín para casi un centenar de usuarios del turno de comida del Comedor Social de la Asociación Leonesa de la Caridad

Con una estrella Michelín y dos soles Repsol, Juanjo Losada y Yolanda Rojo se han puesto a los mandos de la cocina del comedor social elaborando un menú especial para aquellos que más lo necesitan. Compromiso y solidaridad se han dado la mano en una mesa en la que no ha faltado de nada.

Losada ha elaborado un menú con todos los alimentos con los que dispone Asleca procedentes de donaciones particulares, supermercados y empresas «para poder dar la comida a todas las personas que acuden cada día a desayunar, comer y cenar durante los 365 días del año» gracias a «una actitud de donar unos alimentos que ahora se están derrochando bastante», ha asegurado.

Un caldo caliente «sin ninguna proteína animal» elaborado con champiñón, ajo y jengibre, y acompañado con una galleta de queso» o la opción de un cocido marinero con un preparado de paella han sido los primeros platos, además de un filete de pollo con verduras y setas salteadas como principal. «Y de postre hemos hecho unos frutos rojos con cremoso de chocolate blanco al que le vamos a poner el toque gracioso con unos petazetas para alegrarles un poco el día a la gente», ha afirmado el chef.

Pocos metros separan el comedor del Restaurante Pablo del Comedor Social de Asleca pero que miércoles se han unido más que nunca tanto física como figuradamente en una iniciativa gastronómica difícil de olvidar.

Una iniciativa con un objetivo claro según el propio chef, «concienciar a la gente de que todo el mundo puede colaborar con Asleca y ser voluntario cualquier día del año, sin necesidad de que sea navidad», así como que «todos los leoneses conozcan cómo funciona la obra social de Asleca».

Un pequeño granito de arena para acercar la Navidad a todas aquellas personas que por diferentes circunstancias no pueden disfrutar de la calidez y familiaridad de unas fechas tan especiales. Un pequeño granito de arena que ha calentado los estómagos y los corazones de todos los usuarios de Asleca.

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