Chelo Muñiz regenta un salón de belleza que tendrá que cerrar por la pandemia. N. BRANDÓN

«Empecé con mi salón de belleza hace 26 años, toda la vida trabajando y ahora tengo que cerrar»

Chelo Muñiz cerrará su negocio tras un año de pérdidas por la pandemia | «No quiero quedarme en casa sin trabajar pero me pilla en una edad muy mala y tendré que formarme para buscar en cualquier sector»

Miércoles, 10 de febrero 2021, 11:13

26 años con un negocio abierto dan para mucho. Bien lo sabe Chelo Muñiz, que después de levantar su salón de belleza hace más de dos décadas y conseguir mantenerlo «tras pasar crisis y crisis e ir tirando», ha tenido que tomar una decisión tajante: ... el cierre. «Llevamos casi un año de pérdidas y sin trabajo», explica en la entrada del centro, uno de los pocos lugares del local que todavía no ha empezado a desmontar antes del cierre.

Publicidad

La falta de clientela, el miedo al contagio y sobre todo la crisis que obliga a la gente a economizar gastos son las razones que se esconden tras la decisión de Chelo, que ve cómo a sus 53 años el negocio de su vida tiene fecha de caducidad. «Llevo toda la vida trabajando, todavía me quedan años por cotizar y ahora tienes que cerrar», lamenta al ser consciente de que «me pilla en una edad muy mala».

«Muchos autónomos se están echando las manos a la cabeza porque no saben cómo pagar los créditos ICO»

La decisión no solo afecta a Chelo: la inviabilidad de mantener el negocio arrastrará también a la empleada que desde hace 20 años trabajaba en el salón. «Esto no va a mejorar en breve y no se pueden mantener los gastos», explica Chelo, que decidió no acogerse a ningún crédito ICO para afrontar los meses pasados. «Muchos autónomos se están echando las manos a la cabeza porque ahora tienen que empezar a devolver los créditos y no tienen con qué porque los negocios siguen sin funcionar».

Con dos hijos adolescentes a su cargo y con ganas de seguir trabajando -porque si algo tiene claro esta leonesa es que «no quiero quedarme en casa»- Chelo se enfrenta a un futuro incierto tanto a nivel personal como laboral.«No es que no haya trabajo aquí, es que no hay trabajo en ningún lado», comenta.

«No es que no haya trabajo aquí, es que no hay trabajo en ningún lado»

De momento y hasta que formalice su situación y cierre definitivamente, el futuro más cercano de Chelo pasa por seguir formándose y haciendo cursos con el objetivo de encontrar un trabajo «sea de estética o en cualquier otro sitio, no queda otra».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas

Publicidad