Una discusión por el ganado entre dos hombres acaba en un tiroteo y juicio por tentativa de homicidio

Uno de los acusados bajó del vehículo en el que iba y se dirigió al otro después de haber cogido una pistola de aire comprimido que llevaba bajo el asiento. Tras cuatro o cinco disparos hacia el otro hombre, que estaba cuidando a su ganado, sin que ninguno le alcanzase, el ganadero emprendió la huida a la carrera.

Tal y como refleja el fiscal en el escrito de acusación, se volvieron a encontrar minutos más tarde en otro camino. En esos momentos, uno de ellos estaba arreando al ganado para recogerlo cuando el otro acusado bajó del coche con un monedero entre sus manos.

Cuando estaba a metro y medio de distancia del otro varón sacó del monedero una pistola, le apuntó a la cabeza y disparó. La víctima de estos hechos se llevó las manos a la cabeza y el proyectil le alcanzó en el antebrazo izquierdo.

En esos momentos, y valiéndose de un palo que llevaba para el ganado le dio un golpe en la pistola, la cual cayó al suelo. Con el palo siguió propinándole golpes con los que impidió que recuperase el arma. En el momento en que intentaba entrar en el coche, el ganadero «le sujetó y tiró de la cabeza hacia atrás enganchándole por los ojos», tal y como se relata en el escrito de acusación del fiscal, al que ha tenido acceso leonoticias. Ambos abandonaron el lugar en distinta dirección.

Como consecuencia de estos hechos ambos acusados resultaron con menoscabos en su integridad física. Uno de los implicados sufrió contusiones no específicas en la cabeza y en la espalda, y laceraciones conjuntivales con hiposfagma en ojo izquierdo, que no requirieron de tratamiento médico. Las heridas curaron sin secuelas en doce días de perjuicio básico.

Por su parte, el otro acusado sufrió lesiones consistentes en una herida con orificio de entrada en el borde de la cara anterior del antebrazo izquierdo, que precisó de tratamiento médico-quirúrgico posterior consistente en la extracción del proyectil bajo anestesia local y curas posteriores, tardando en curar treinta días de los cuales tres fueron de perjuicio grave, dieciocho de perjuicio moderado y nueve de perjuicio básico. Además, tiene una secuela «por perjuicio estético ligero» de una cicatriz de cinco centímetros. Su atención generó unos gastos sanitarios al Sacyl de 1.253,40 euros.

El fiscal considera que los hechos narrados son constitutivos de tres delitos, uno de homicidio en grado de tentativa, otro de tenencia ilícita de armas, ya que el acusado carecía de permisos, y en tercer lugar un delito de lesiones leves del que es autor el otro varón.

Al primero de los acusados le pide siete años de prisión por el primer delito y un año y ocho meses por el segundo. Además piden para él una orden de alejamiento del otro hombre de 500 metros.

Por su parte, al otro varón le piden tres meses de multa con una cuota diaria de 10 euros, así como una orden de alejamiento contra el otro acusado.

El juicio se celebra este lunes 21 de noviembre a partir de las 9:30 horas en la Audiencia Provincial de León.