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Imagen de los padres de Alejandro Villanueva junto al menor. I.S

La desesperación de unos padres ante la «falta de recursos» educativos para su hijo con síndrome de Down

Los padres de Alejandro Villanueva, un niño de tres años, denuncian la «insuficiencia» de apoyos en el colegio tras varios meses de reclamaciones sin respuesta

Martes, 3 de diciembre 2024, 08:22

Sara Villanueva es la madre de Alejandro Villanueva, un niño de tan solo tres años con síndrome de Down que, tras comenzar su etapa escolar, se ha encontrado con una grave falta de recursos educativos. A pesar de que un informe psicopedagógico detalló las «necesidades específicas» de Alejandro, el centro educativo no está cubriendo adecuadamente su plan de apoyo.

Al iniciar el curso escolar, los padres de Alejandro solicitaron un informe a las coordinadoras que identificara las necesidades educativas del niño. Dicho informe determinó que Alejandro requería cinco sesiones semanales de pedagogía terapéutica (PT) y cinco sesiones de audición y lenguaje (AL). Sin embargo, la realidad ha sido bien diferente: el niño está recibiendo solo cuatro sesiones de PT, y una única sesión de AL, que, además, no es «suficiente» para cubrir sus necesidades, dado que el colegio no dispone de más recursos.

«La situación es inaceptable. Estamos luchando por los derechos de mi hijo, que no tiene los apoyos que necesita para su desarrollo. Mi hijo no está recibiendo lo que le corresponde y eso está retrasando su progreso», denuncia Sara Villanueva, madre del menor.

Refuerzo escolar

A pesar de los esfuerzos del centro escolar, que ha mostrado su compromiso con la causa, según han querido destacar los padres del menor, la Dirección Provincial de Educación de León no ha respondido a las peticiones de recursos adicionales. Los padres, junto con el colegio, presentaron una reclamación formal el 23 de octubre, pero hasta la fecha no han recibido ninguna respuesta por parte de la administración educativa.

Imágenes de Alejandro Villanueva. I.S
Imagen principal - Imágenes de Alejandro Villanueva.
Imagen secundaria 1 - Imágenes de Alejandro Villanueva.
Imagen secundaria 2 - Imágenes de Alejandro Villanueva.

«Desde que nos entregaron el informe psicopedagógico en octubre, hemos seguido todos los pasos. El centro ya ha hecho varias reclamaciones, y nosotros también como familia, pero no nos hacen caso. Ya no sabemos qué más hacer, solo queremos que se haga justicia para Alejandro y para otros niños en su situación», señala la madre.

«Solo cuenta con media hora semanal de ayuda en lenguaje y audición»

El principal motivo de preocupación es la escasez de tiempo que Alejandro tiene para recibir las sesiones de logopedia. «Solo tiene media hora a la semana de audición y lenguaje, lo cual es completamente insuficiente para un niño con discapacidad». Un retraso en el apoyo temprano que puede generar que la dificultad del menor sea mayor a la hora de desarrollar un aprendizaje en la comunicación.

Costes familiares añadidos

Además, la familia se ve obligada a costear de manera privada las sesiones adicionales de logopedia, a razón de 50 euros por sesión, lo que subraya la «injusticia« del procedimiento. Una «obligación» de pagar un servicio público que ha sido denominado como «obligatorio» para Alejandro por parte de especialistas dentro del sector. «Este es un servicio educativo necesario, no un lujo. Cada día que pasa, mi hijo pierde oportunidades para avanzar», lamenta.

Sara Villanueva junto a su hijo Alejandro Villanueva. I.S

A pesar de la falta de recursos, el centro educativo se ha mostrado comprometido con la situación de Alejandro y ha mantenido contacto con la familia para seguir de cerca los trámites. La directora del colegio ha informado a los padres sobre las reuniones con la inspectora y la intención de solicitar más apoyo para los niños con necesidades educativas especiales. La directora y los maestros han estado muy pendientes del caso, según ha explicado la madre del menor.

«No se está actuando con la urgencia que requiere el caso»

Un sentimiento que se respalda por el centro, pero en el que la administración «no está actuando con la urgencia que requiere el caso. Necesitamos que se asignen más recursos para que Alejandro y otros niños en su situación puedan recibir la atención adecuada», concluye Sara Villanueva, quien continúa luchando por los derechos de su hijo en un sistema educativo que no parece tener suficientes recursos para cubrir las necesidades de todos los estudiantes.

La familia de Alejandro sigue esperando una respuesta de la Dirección Provincial de Educación, confiando en que las autoridades tomen medidas para que el niño pueda recibir la atención que su situación requiere. Mientras tanto, los padres no cesan en su empeño de asegurar un futuro educativo mejor para su hijo.

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