Personaje singular, para muchos con exceso de pasión en todo lo que hace y de esos que no siembran indiferencia.
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Sea como sea David González pasa por ser uno de esos empresarios singulares del panorama provincial.
Hace años convirtió el 'Chorco' en un establecimiento hostelero ... multitudinario (de ahí ese conocido 'David, el del Chorco'), más tarde centró su actividad en el comercio, regente Casa Abascal en Posada de Valdeón durante el verano y hasta se ha atrevido con los medios de comunicación, como comentarista y productor.
Ahora «es el momento de reinventarse» y, como asegura, lo hace en un mundo totalmente desconocido para él: el taxi. «Tengo la ilusión de un niño», remarca.
Asegura que se aprendió todo el callejero de León (las rutas del taxi, en realidad) en menos de una semana y que al examen fue «con muchos nervios», pero la realidad es que hoy es taxista en León capital con el '151' en la puerta.
Su salto al taxi es la evidencia de que «en la vida no puedes detenerte ante nada». Caín, su 'casa Abascal' son tres meses «de intenso esfuerzo personal y familiar, pero no da para un año completo y el taxi siempre me llamó la atención».
Así que visto lo visto ha decidido sentarse al volante de su primer taxi. «La experiencia merece la pena», asegura.
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