¿Por qué cuesta más viajar de León a Madrid que desde Oviedo?

Algo parecido pasa con Valladolid. Un leonés pagaría 59,50 euros para coger el AVE de las 6:45 horas el día 26 de marzo con destino Chamartín. Para ese mismo trayecto, un vallisoletano pagaría 58,10 euros, apenas un euro y medio menos saliendo 140 kilómetros más cerca de la capital de España. Sin embargo, lo que le costaría a un leonés ir a la ciudad del Pisuerga —mismo tren, fecha y hora— sería 47,65 euros.

Desde Renfe la explicativa viene dada por el sistema Revenue Management, implantado hace años en la compañía y que fija los precios a través de un algoritmo que emplea diferentes factores para analizar la principal ley que rige el mercado: la oferta y la demanda.

Según aseguran desde el Gabinete de Prensa del Noroeste de España, hay cuatro aspectos determinantes a la hora de establecer los billetes.

El primero y el más destacado es la antelación con la que se compra. Anteriormente la compañía ofertaba precios más bajos conforme se acercaba la fecha de salida, con la pretensión de llenar los asientos vacíos. Sin embargo, desde la implantación del Revenue Management se ha dado un giro primando con las mejores ofertas a quienes adquieran sus viajes con mayor antelación.

Otro aspecto por el que Renfe interfiere en los precios va en relación con las características de los viajeros. «Existen muchos tipos de viajeros: de negocio, los de ocio, etc. Incluso una misma persona puede ser un tipo de viajero diferente dependiendo de sus circunstancias. Un día puede estar navegando por si encuentra algo económico porque quizás vaya a Alicante a pasar unos días y otro día ir directamente a taquilla para comprar un billete en el próximo tren a León por un asunto familiar urgente», explican en este sentido. En función de ello, el precio final varía.

Algo que está directamente vinculado al último factor del Revenue Managament, «el momento adecuado». Con ello la empresa busca adelantarse a las necesidades de los clientes, «entender cuando compra cada uno de ellos» y «saber cuánto está dispuesto a pagar el viajero cada día y tener un precio para esa persona», detallan en la web.

Por último, justifican determinados precios a las ofertas relacionadas con la inauguración de la variante de Pajares.

Este es el argumento institucional a través de «un mecanismo que utilizan desde finales de los años 90 las compañías aéreas o los hoteles para fijar los precios», concluyen.

En sentido contrario sucede algo similar. Los precios con dos semanas de antelación en los trayectos Madrid-Oviedo son prácticamente iguales que los Madrid-León, estando el primer destino 119 kilómetros más lejos.

Así, para ir de la capital española a tierras leonesas deberán pagar 52,40 euros en el Alvia de las 14.52. A un ovetense le saldría por 59,85 euros el mismo viaje. Mientras que viajar de León a Oviedo en ese mismo enlace cuesta 26,60 euros.