La «contrafiesta» del 23 de abril lleva la cultura al centro de León: «la única fiesta es la del libro»

«Regalamos libros y hablamos con los leoneses para que se conciencien de seguir en la lucha por nuestra autonomía, por nuestra identidad, y para conocer nuestra cultura a través de los libros, las conferencias y actividades», ha apuntado el vicepresidente Luis Manuel Esteban.

Los organizadores han hablado de «éxito» en esta concentración, que ha seguido todos los protocolos sanitarios, y en el que se han entregado volúmenes de los fondos personales de cada socio. Sin querer interferir en el negocio del sector de los libreros, quienes también han salido a la calle para celebrar su día, Conceyu ha querdio así «que la gente tenga algo que celebrar: el Día del Libro».

Y es que ese era el claro mensaje que quisieron lanzar los leonesistas desde la plaza de Botines: en este 23 de abril, oficialmente Día de Castilla y León, poco hay que celebrar. «Esta autonomía es un desastre, perdemos población, la economía, bajan las empresas y el País Leonés se encuentra en los primeros puestos de menos población. No hay nada que celebrar, no hay ningún modelo de éxito ni para progresar».

La organización ha aprovechado la cita para recoger donativos de los leoneses con los que se pretende celebrar, cuando pase la pandemia, una gran marcha por la autonomía leonesa para la que ya se han adherido numerosas organizaciones.

De momento, y hasta que eso ocurra, Conceyu ha querido que sea a través de la cultura como los ciudadanos conozcan mejor su historia y la realidad de una comunidad en la que no creen.