Conocer los manjares del otoño que se pueden disfrutar

Comestibles, sin interés, tóxicas y mortales. Cuatro clasificaciones y cuatro colores para aprender a diferenciarlas mientras se conocen las setas que pueblan la provincia de León.

El Palacio de los Guzmanes, sede de la Diputación de León, ha sido una edición más el entorno envidiable en el que se han expuesto cerca de 160 ejemplares, medio centenar menos que el pasado año, de estos hongos. Una exposición que se ha logrado tras la búsqueda de ejemplares que se llevó a cabo en la jornada previa y con la que se ha podido completar una inmensa radiografía de los ejemplares que llenan la provincia de León.

En diferentes mesas, cada una con su nombre en una tarjeta que también indica si es comestible o puede llegar a ocasionar la muerte. Todo ello con la organización y colaboración de los socios de la Asociación Micológica Leonesa San Jorge que año tras año organizan esta exposición enmarcada en la Semana Micológica que este año alcanza su edición número 48.

Uno de los manjares del otoño, siempre y cuando se conozca la variedad y se sepa cocinar. Para lo segundo hay que tener buena mano y para lo primero buena vista, aunque gracias a estas jornadas se puede aprender.

Las setas llegan a las praderas y los montes de León con las primeras lluvias y hacen las delicias de los paladares más exigentes. Pero hay que tener mucho cuidado, ya que en ocasiones sus diferencias son mínimas y se puede pasar de un hongo de extraordinario sabor a otro que provoque una intoxicación o incluso la muerte.

Para evitar estas situaciones se recomienda sólo coger aquellas que se conocen con seguridad y acompañarse en la aventura de un experto, como los que componen la Asociación Micológica Leonesa San Jorge.

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