La Conferencia Episcolal rechaza en León la eutanasia: «Las personas son incurables pero no incuidables»

«El derecho a la libre decisión no es un valor absoluto hay que ponerlo en relación con lo que se decide y las consecuencias que tiene para otros, parte de un don que recibimos», señala el secretario general, que considera que «hay personas que sufren y lo que hay que atender es al sufrimiento».

Una atención que debe, en palabras de Luis Argüello, ser la solución al sufrimiento y que permita que no «se abra la puerta de la muerte como única solución».

Para las personas con un sufrimiento incesante y continuado reclama «una fuere atención, al acompañamiento, al respeto». Además, anima a que vivan «su propia existencia». Ante este tipo de casos, sentencia con que «hay personas que son incurables pero no incuidables».

Don Luis Argüello también se ha referido a otra cuestió en constante debate como es el aborto. Afirma que en el seno de las mujeres embarazadas habita otra vida y subraya que esa cuestión es una línea roja de la Iglesia Católica

La cuestión de la eutanasia no es el único asunto en el que circula el debate en el entorno eclesiástico. Luis Argüello apunta a «dos preocupaciones» más: «El desarraigo y la desvinculación».

«Las condiciones laborales» o «las migraciones», tanto las movilidades como el tránsito de lo «real a lo virtual», provocan, según Don Luis Argüello, la «desvinculació y ruptura de vínculos que se manifiestan en la vida personal y familiar con su relación con lo trascendente».

Por otro lado, pone en valor la labor de varios ministerios de la Iglesia en «la primera línea» de la lucha, todavía vigente, contra el coronavirus. «Le ha afectado como a toda la sociedad, en primera persona, con el fallecimiento de muchas personas», apunta, en referencia a sacerdotes o capellanes del sistema de salud, entre otros.