Un acuerdo entre acusación y defensas, con el visto bueno del juez, ha permitido cerrar la demanda interpuesta en su día por dos empleadas de la limpieza, una de ellas en el Área Deportiva de Puente Castro, contra el entonces directivo de un club deportivo de la ciudad.
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El acuerdo contempla el reconocimiento de culpa por parte del acusado que asume dos años de prisión por cada caso, además de una indemnización que se eleva a los 5.000 euros.
El acuerdo cierra el caso en el que la defensa siempre ha defendido la inocencia del acusado remarcando que las denuncias habían llegado por venganza de las víctimas.
Los abusos tuvieron lugar tanto en las instalaciones deportivas, según el relato de este caso, como en una vivienda particular del ahora condenado.
En el primero de los casos aprovechó la ausencia de otro personal para hacer tocamientos a una de las empleadas de la limpieza y, en el segundo, cuando la mujer accedía a la residencia personal del encausado.
Una de las víctimas llegó a solicitar el traslado ante la permanente sensación de acoso en las instalaciones deportivas.
En el caso de la segunda víctima la mujer solicitó una exploración previa a la denuncia en la que se determinaron diferentes lesiones, entre ellas ematomas en un pecho y muñecas.
El condenado asume la pena de dos años, libertad vigilada durante tres años, y prohibición de acercarse a la primera mujer durante cuatro años, además de una indemnización de 3.000 euros.
La misma pena se impone en el segundo caso con indemnización de 2.000 euros.
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