Más de cien municipios de León presentan niveles de riesgo por el cancerígeno gas radón

Más de un centenar de municipios de la provincia de León presentan concentraciones de gas radón responsable, a nivel nacional, de un diez por ciento de los casos diagnosticados de cáncer de pulmón.

Son los datos publicados por el equipo de Radonspain, laboratorio de radón en España que mide y asesora en la ejecución de medidas preventidas de este gas de origen natural incoloro e insípido que se produce por la desintegración radiactiva natural del uranio y que tiende a concentrarse en viviendas, escuelas y centros de trabajo.

Aunque la concentración del gas es muy variable dependiendo la zona de España en la que se mida su presencia, tiende a aparecer en mayor cantidad en zonas donde existe uranio en la roca madre, como es el caso del noroeste peninsular.

En el caso de la provincia de León, son un total de 118 los municipios que presentan niveles de riesgo de este gas cancerígeno. En concreto, 95 localidades ubicadas en el norte, sur y oeste de la provincia tienen un nivel 1 de riesgo medio, mientras que 23 presentan un nivel 2, el más alto.

Es común que el gas penetre en las viviendas en contacto con el suelo a través de fisuras o grietas en los cimientos o rendijas o huecos de construcción. El subsuelo es la fuente más habitual de radón, aunque también se ha detectado en el agua potable.

La inhalación de gas radón produce que sus partículas se depositen en las células que recubren las vías respiratorias, donde pueden dañar el ADN provocando cáncer de pulmón si las exposiciones al gas son prolongadas. Si a esto se suma que la persona es fumadora, se multiplica la posibilidad de contraer cáncer de pulmón.

Las concentraciones más altas de radón se suelen dar en invierno, y es más habitual que sean más elevadas por la noche. El límite de radón que establece para los hogares la normativa de la UE y que recoge la página Radonspain es de 300 Bq/m3. Con medidas adecuadas, es posible bajar el límite a 100 en edificios ya construidos.

Desde 2021 la Junta de Castilla y León trabaja para elaborar un mapa de la presencia de gas radón en la comunidad, trabajos que según recoge El Norte de Castilla «ha finalizado y ahora Sanidad está en proceso de elaboración del estudio en colaboración con la Universidad de Cantabria para la puesta en marcha de los mapas».

Los mayores índices de este gas en la península se dan en Galicia, con más del 70 por ciento del territorio afectado, seguido de cerca de Extremadura con un 47 y Castilla y León, especialmente Ávila y Salamanca, con el 37.

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