La carrera electoral, en cifras

Todo será extraño en la nueva campaña electoral que se avecina de cara al 10N. Extraño por la rápida repetición electoral, por una convocatoria que se reducirá a siete días de campaña, por la ausencia de 'banderolas' y por la presencia mayoritaria de los mismos cabezas de cartel en las principales formaciones electorales. Hay excepciones, por supuesto.

En el seno de los partidos más que de una campaña electoral se habla de una campaña «de fidelización». El PSOE se siente ganador en León con Javier Cendón como candidato al Congreso. En su foro interno se estima que podría estar por encima de los 100.000 votos, un techo que le situaría de largo como la formación más votada. Casi 95.000 obtuvo en la última convocatoria del mes de abril y crecer en esos 5.000 votos se da como un asunto de lo más factible.

Esa idea, se advierte en el seno de las filas socialistas, se apuntalará con la presencia en León de hasta tres minutos y con una petición expresa a Pedro Sánchez para que también se sume a la campaña en la provincia.

Todo ello en una formación en la que, inicialmente, no se teme el efecto de la presencia de la UPL. «En todo caso los votos que se vayan a la UPL desde el PSOE serán compensados por los que lleguen desde el desencanto de Podemos», también se ha advertido de un modo extraoficial.

A Javier Cendón le tocará competir como principal rival con el candidato del PP a la Cámara Baja. En el PP el actual secretario general de la formación en León, José Miguel González, será el candidato.

En el PP se considera que «fue un error conceder el primer puesto en la lista a Carmen González Guinda» quien ahora ocupará el número 2 con la esperanza de 'arañar' su sillón en el Congreso a Ciudadanos.

Para el PP no hay otro objetivo que superar ampliamente los 70.000 votos (68.000 obtuvo en abril) y bajar de esa cota situaría a la formación popular ante un delicado escenario. «Hemos mejorado el cartel», se advierte.

«Nunca lo tenemos fácil, así que a pelearlo como siempre». Diez palabras que definen la forma de pensar de Ciudadanos (Cs) de cara a la precampaña y la campaña que se acerca de cara al 10N.

Con Justo Fernández como eje de la campaña la formación naranja asume que no será sencillo mantener los 50.000 votos de la última cita electoral. «No podemos llegar a esa cifra, o sí», se asegura con no poca ironía.

No lo tiene sencillo Cs y no lo tiene fácil Podemos. Su fractura a nivel nacional, el cierto desorden apreciado durante el escaso tiempo en el que se ha intentado formar un nuevo Ejecutivo y esa sensación de desvarío interno amenazan con dañar seriamente su capacidad de atraer voto.

En León le toca defender el escenario de Podemos a Ana Marcello, la misma candidata que en abril y la misma que entonces lamentó no haber podido alcanzar los 35.000 votos. «Es una decepción pero seguiremos trabajando por la gente tengamos o no representación», aseguró Marcello entonces.

Más comprometido es el escenario en la actualidad pero en el seno de la formación morada no se descarta una sorpresa fidelizando a sus electores más próximos.

Si hay una incógnita sobre la mesa electoral de este 10N ésta llega de la mano de la Unión del Pueblo Leonés (UPL). Los leonesistas, insisten, están seguros de que el actual es su «momento».

Muy lejos y no como referencia se toman los casi 14.000 votos de las generales de 2004 y los casi 5.000 de 2008. «Estamos en otro escenario y tenemos unas buenas sensaciones», ha asegurado su candidato, Luis Mariano Santos.

Buenas sensaciones es, al menos, mantener o superar los 28.000 votos que se alcanzaron en la cita electoral autonómica. La gran pregunta es de dónde llegará similar número de votos. Más lejos se encuentra la opción de conseguir un diputado nacional.

«Para León y para los leoneses sería clave estar en el Congreso», se remarca desde la UPL. ¿Y para alcanzar ese objetivo qué número de votos se precisaría? No menos de 45.000, una cifra que no parece sencilla en el actual escenario.

El círculo electoral se cierra en el escenario leonés, al menos en la primera línea, con la presencia de VOX. Parte de 33.500 votos, la tendencia nacional le desgasta sobremanera y el rearme local llega de un nuevo presidente de la junta gestora (Carlos Pollán) y el posible 'gancho' que suponga un cabeza de lista que aún está por determinar.

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