La nueva normalidad que ha traído la pandemia ha provocado muchos cambios en la sociedad leonesa, entre los que destacan las terrazas hosteleras. Tomarse un refresco donde antes aparcaba un coche ha sido una de las muchas estampas que la Covid-19 ha ... dejado en la ciudad tras casi 18 meses desde el inicio de esta problemática.
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En ese sentido, con el fin de ayudar a los hosteleros en su lucha por superar la crisis económica que aterrizó de la mano del coronavirus, el Pleno del Ayuntamiento de León aprobó a finales de julio de 2020 el aplazamiento a 2021 del cobro de las liquidaciones devengadas de diferentes tasas, entre ellas la de veladores y terrazas para la hostelería y la de recogida de basuras para para las actividades que no hubieran sido declaradas esenciales, así como la exención de dichas tasas del ejercicio de 2021.
«Las tasas quedaron devengadas a 1 de enero de 2020, por lo que no se podía eximir de ese pago. No había forma legal de hacerlo», explica a Leonoticias Carmelo Alonso, concejal de Hacienda. «De esta forma, hemos pospuesto el pago de 2020 un año y hemos eliminado las tasas durante el 2021, lo que a efectos prácticos es como si hubiéramos eliminado la primera».
Ahora, con el paso de los meses, ha llegado la hora de pasar por caja para muchos de los hosteleros, hasta 665, que deberán efectuar el pago correspondiente al ejercicio 2020, tras varios meses de funcionamiento en la nueva normalidad, lo que supondrá un ingreso de 184.000 euros a las arcas municipales.
El concejal de Hacienda en el Ayuntamiento de León también ha recordado que el acuerdo que ofrece una mayor amplitud a las terrazas sin coste para el hostelero está vigente hasta el próximo 31 de diciembre de 2021, y pese a que augura que «quizá habrá que ampliarlo», Carmelo Alonso ha afirmado que deberán recuperar los espacios de aparcamiento y las plazas cedidas a los negocios de este sector.
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Sin embargo, esto no supone volver a las terrazas pre-pandemia. Y es que el edil ha recordado que existe una normativa europea que obliga, desde 2019, a mantener una distancia de 1.80 metros entre la fachada y la primera mesa: «Los ayuntamientos vamos un poco a remolque en este tipo de adaptaciones y nos ha llevado más tiempo del que podíamos. Pero aprovechando que la situación ofrece un buen escenario para cambios, estamos trabajando y vamos a modificar la ordenanza para adaptarla a la normativa».
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