Aumenta un 20% el número de personas atendidas por Cáritas Diocesana en León

Cáritas Diocesana en León celebra, coincidiendo con el Corpus Christi, la Semana de la Caridad. Siete días cargados de actividades que tienen como objetivo sacar a la calle la excepcional labor que a diario se realiza en las parroquias de la Diócesis y que buscan dignificar en todos los aspectos a las personas que acuden a la organización buscando ayuda.

En septiembre de 2023 Aurora Baza se ponía al frente de Cáritas en León, que en el último año ha experimentado un aumento del 20 por ciento en el número de personas atendidas, coincidiendo con a su vez con el aumento del nivel de pobreza. Asegura que «hay muchas carencias» que se están notando» y las organizaciones juegan un papel «fundamental» en coordinación con las administraciones.

Cáritas Diocesana León está compuesto por cerca de 30 trabajadores y 540 voluntarios, que esta semana se citan en la plaza de Regla por la tarde para celebrar un acto en el que «sensibilizar y mostrar el apoyo de León a las personas vulnerables».

La imagen que a nivel general se tiene de Cáritas ha cambiado con los años, pasando de considerarse una organización que se ocupaba de dar bolsas de comida a una que trabaja en «dignificar a las personas en todos los aspectos: potenciar la información y el empleo, acompañar, acoger y sensibilizar». La labor de Cáritas va más allá de tramitar, ya que la familia que la compone acompaña a las personas «en todo su proceso», haciendo seguimiento posterior y preocupándose por ellos «hasta después de que salga de esa situación».

Siempre al lado de su parroquia, el septiembre se ponía al frente de Cáritas Diocesana y se planteaba el reto de «aprender y aprender más poco a poco para conocer qué es Cáritas diocesana, qué usuarios atiende, qué programas tiene y cuál es la realidad social». Se puso pronto manos a la obra y en febrero concluyó su recorrido por todas las parroquias de la diócesis donde pudo conocer «su realidad» y constatar las diferencias entre las rurales y las urbanas.

Entre las principales diferencias, destaca el perfil más envejecido de los voluntarios en la zona rural, con jóvenes que participan menos y que «hay que potenciar» buscando herramientas. Se propone además reforzar las parroquias con puntos de encuentro para que las personas mayores que se encuentran solas en los pueblos, donde existen menos recursos y actividades, puedan relacionarse.

Cáritas Diocesana León seguirá trabajando en coordinación con otras entidades y administraciones para mantenerse siempre al lado de las personas más vulnerables.

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