La Audiencia de León condena a cuatro años y medio de prisión al dueño de un hostal que violó a una empleada en 2013

Al respecto, el tribunal considera probado que el acusado «realizó sobre el cuerpo de la víctima actos de inequívoco sentido sexual», como lamer sus pechos e introducir su dedo en la vagina. Estos «hechos tan execrables» se acompañaron de fuerza e intimidación para contravenir la voluntad de la víctima, ya que el agresor llegó a inmovilizarla mientras la sometía a abusos.

Los hechos sucedieron en agosto de 2013 y las partes han tenido que esperar casi siete años hasta la resolución judicial, lo que beneficia al condenado ya que se le aplica la atenuante de dilaciones indebidas, según denunció la asociación Adavas, que ejerció la acusación particular en el proceso. Fuentes del colectivo destacaron que esta medida «implica siempre una injusticia para la víctima ya que supone que se rebaja la pena porque el procedimiento se ha alargado más allá de lo razonable».

Al respecto, las mismas fuentes señalaron que resulta muy difícil acreditar que esas dilaciones son derivadas de la inacción judicial o de la conducta procesal del condenado, mediante el abuso de recursos, una conducta que puede sobrepasar el ejercicio legítimo del derecho a la defensa.