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Asociaciones de Salud Mental de León, Palencia, Ávila y Burgos han sido seleccionadas por Fundación ONCE para poner en marcha un programa que fomente el empleo entre jóvenes con discapacidad psicosocial (la derivada de problemas de salud mental) y les ayude así a mejorar su ... inserción social.
Alfaem Salud Mental León, Asociación Salud Mental Palencia, FAEMA Salud Mental Ávila y Prosame Asociación pro Salud Mental de Burgos son las cuatro entidades de Castilla y León que se beneficiarán en esta edición del Programa de Ayudas para el Refuerzo de la Empleabilidad de Personas Jóvenes con Discapacidad Psicosocial, impulsado por Fundación ONCE con el apoyo del Fondo Social Europeo (FSE) para mejorar la inserción de jóvenes con problemas de salud mental, ya sean únicos o estén asociados a otro tipo de discapacidad.
Los proyectos se denominan 'PasaXT hacia el empleo 2020' y en él participan 15 jóvenes. Su objetivo es contribuir a la recuperación y empoderamiento de jóvenes con discapacidad psicosocial a través del descubrimiento de sus propios potenciales y dotándoles de conocimientos, destrezas y habilidades para favorecer y acelerar su inclusión sociolaboral.
En esta ocasión se priorizará la participación de mujeres, para contribuir a la igualdad de oportunidades en el camino de acceso al mercado, así como de personas que viven en el medio rural. Según sus impulsores se trata de «una llamada al trabajo en equipo comprometido y proactivo para que las personas jóvenes sean protagonistas en el desarrollo de sus propios proyectos de vida».
La formación comienza el próximo 16 de noviembre y terminará el 12 de marzo de 2021. Consta de dos tipos de acciones: una fase de intervención grupal, con 224 horas por participante, y otra individual, con 96 horas.
Además de estas cuatro entidades de Castilla y León, son beneficiarias de este programa de ayudas otras 10 organizaciones de 9 comunidades autónomas con programas de formación para 70 jóvenes con discapacidad psicosocial.
Según los últimos datos disponibles, en 2018 la tasa de actividad de las personas jóvenes con discapacidad de entre 16 y 24 años fue del 23,9%, frente al 36,9% de las personas de la misma franja de edad sin discapacidad.
Además, dentro del colectivo de la discapacidad, que tiene una tasa de actividad del 34,5%, este valor es menor para las personas con discapacidad psicosocial, cuya tasa de actividad es del 29,1% y su tasa de empleo del 17,6%. Estos valores contrastan con los obtenidos para el colectivo de personas sin discapacidad, con una tasa de actividad del 77,6% y de empleo del 65,9%.
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