Las agencias matrimoniales resisten a Tinder entre todas las edades: «Son una opción más segura»

En la era digital, las agencias matrimoniales tradicionales enfrentan un desafío sin precedentes en comparación con su papel en el pasado. Mientas que antes eran el principal recurso para quienes buscaban pareja, hoy en día se encuentran en una competencia feroz con aplicaciones de citas y plataformas en línea. La revolución tecnológica ha transformado la forma en que las personas se conectan y encuentran el amor, presentando tanto oportunidades como retos para estos servicios de emparejamiento.

En una entrevista a este medio, Alicia López, directora de Lazos Agencia Matrimonial y psicóloga especializada en terapia de parejas, cuenta que «las agencias matrimoniales han existido toda la vida. Ahora, con las aplicaciones de citas, las personas están buscando opciones más seguras y confiables para conocer a alguien». Estas agencias son «una alternativa para las personas que quieren evitar los peligros de quedar con alguien desconocido en las aplicaciones de citas».

Esto para Alicia y su agencia ha sido como un «efecto rebote». Además, asegura que «las agencias son una opción más segura que Tinder», debido a que hay más filtros que pasar, además de psicólogos que evalúan a cada persona.

El perfil de los clientes de Lazos varía considerablemente: desde jóvenes de 21 a 30 años que buscan una relación estable tras probar aplicaciones de citas, hasta personas de 45 a 55 años que desean reconstruir sus vidas amorosas tras divorcios. También atienden a individuos mayores de 55 años que «buscan compañía y nuevas experiencias».

La metodología de Lazos se basa en un enfoque profesional y personalizado. Los nuevos inscritos pasan por entrevistas exhaustivas de una a dos horas con psicólogos para evaluar su carácter, estilo de vida y expectativas en una pareja. Tras estas entrevistas, se les asigna un asesor y «se les ofrece una mensajería privada», dando un plus de seguridad para aquellas personas que no quieran compartir sus datos personales como redes sociales o número de teléfono. Los asesores organizan entre 12 y 24 citas con personas seleccionadas, adaptando cada encuentro a las preferencias del cliente (2 al mes de media). Según Alicia López, «el margen de éxito de la agencia es del 80%».

La demanda de servicios de Lazos ha aumentado especialmente en zonas costeras como Alicante, Málaga y Cantabria, donde el teletrabajo ha impulsado el interés en conocer gente nueva. La oficina de León, que abrió tan solo hace tres años por la gran cantidad de demanda, ya cuenta con entre 2.000 y 3.000 inscritos, y la agencia en total tiene alrededor de 25.000 miembros.

La agencia ofrece un servicio único con una cuota de inscripción de 1.800 euros, que es indefinida y permite a los miembros conocer personas durante toda su vida. Esta estructura de pago asegura que los usuarios están comprometidos con la búsqueda de una relación seria. Además, «la agencia proporciona facilidades de pago y un trato cercano, con asesores que siguen en contacto incluso después de que una pareja ha superado el periodo de prueba de seis meses».

En conclusión, el panorama de las agencias matrimoniales ha cambiado drásticamente con la llegada de la tecnología y las aplicaciones de citas. Aunque enfrentan una competencia feroz, muchas están reinventándose y complementando sus métodos tradicionales, creando un equilibrio que satisfaga las necesidades de una nueva generación de buscadores de pareja.

• Temas
• sociedad
• Bodas