R.F.
León
Martes, 2 de abril 2024, 08:13
Una onda de calor que abarcaría todo el perímetro que comprende la circunferencia entre el puerto del Manzanal, el límite con Asturias y Palencia y la localidad de Villaquejida. Y un espacio arrasado por una bola de fuego que borraría León capital y su alfoz.
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Ese sería el devastador escenario que dejaría una bomba atómica que explotara en la ciudad de León. Así lo determina la página 'Outrider', que ofrece simulacros de explosiones nucleares en cualquier rincón del planeta y con diferentes parámetros de capacidad de la ojiva nuclear que provocarían mayor o menor destrucción en la zona afectada.
Si optamos por comprobar que ocurriría con la cabeza nuclear de menor capacidad, la conocida como 'Low-Yield Nuke', similar a la utilizada en Hiroshima, y con 15 kilotones de potencia, también podemos optar por dos escenarios: detonación en tierra o detonación aérea.
La que menos daños causaría sería una detonación en tierra que, sin embargo, incrementaría el riesgo de radiación.
En caso de explosión en tierra y en el centro de León, la bomba dejaría 25.519 fallecidos y 33,958 heridos a tenor de la capacidad destructora que tiene. Si se diese en el aire, la cifra de muertes se incrementaría hasta las 36.966 y los heridos serían 56.295. a ello habría que sumar una bola de fuego que alcanzaría todo el centro, una onda expansiva de 10 kilómetros cuadrados y una radiación de cuatro kilómetros cuadrados. La onda de calor llegaría a un perímetro delimitado por la avenida Doctor Fleming, Fernández Ladreda, la Ronda Este y la Universidad de León.
La situación sería mucho más compleja en caso de ataque de una 'Tsar Bomb', de las que disponía la antigua Unión Soviética, y con potencia de 50.000 kilotones.
Una detonación en el aire crearía una bola de fuego que abarcaría todo el alfoz y la onda de calor cubriría un radio que llegase al Manzanal, al límite con Asturias o Palencia y hasta Villaquejida, dejando 205.755 muertos y 142.356 heridos, en una afectación de 11.000 kilómetros cuadrados.
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Si se produjera sobre el terreno, la cifra de fallecidos bajaría a 190.000, con 60.000 personas heridas, pero dejaría una zona de radiación que llegaría a Sahagún, Sena de Luna, Laguna de Negrillos, el embalse del Porma, Val de San Lorenzo o Almanza.
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