Una terreza de unos de los bares que pertenece a San Andrés donde no se puede servir en el interior. J. Mendoza

«Es absurdo, caminas diez metros y ya puedes entrar al bar»

En la avenida San Ignacio de Loyola muchos de los bares permanecen a San Andrés por lo que no pueden servir en el interior de los bares, mientras que otros que son de la capital leonesa esquivan este «castigo» | «Los clientes que van a tomar café a mi bar luego van a ir a los de al lado en los que sí pueden entrar dentro», comenta uno de los hosteleros afectados por la medida.

Miércoles, 14 de abril 2021, 12:56

En la misma calle, unos bares pueden servir en el interior mientras que otros solo en terraza. Esta es la paradoja que se da en la avenida San Ignacio del Loyola, una vía que transita en parte por la capital leonesa mientras ... que otra por San Andrés del Rabanedo, que desde este martes tiene el interior de los bares cerrado. «Caminas 10 metros y ya puedes entrar al bar, es de locos», apunta uno de los clientes,

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La Junta ha implantado la medida de cerrar el interior de los bares en aquellos municipios que tengan una incidencia a 14 días superior a 150 por cada 10.000 habitantes, San Andrés ha tenido que cerrar el interior de los bares al menos durante 15 días una restricción que de momento no ha afectado a los vecinos de León creando extrañas situaciones en las que con cruzar la calle ya se puede tomar un café en interior del bar. «Me parece medida absurda, los clientes que van a tomar café a mi bar luego van a ir a los de al lado en los que sí pueden entrar dentro», comenta uno de los hosteleros afectados por la medida.

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Galería. Un cartel indica que el bar tiene cerrado el interior.

Pillados por sorpresa

Una paradoja que ha pillado a muchos clientes por sorpresa, y es que con tanto cambio propiciado por el coronavirus ha hecho que muchos han ido a tomar el café sin conocer estas nuevas restricciones. «No tenía ni idea que en esta zona solo se puede tomar el café en la terraza, nos hemos sentido aquí porque hoy hace bueno», comenta una señora que hace hincapié en «que esta medida no tiene ningún sentido».

Por su parte los hosteleros que por ahora no se han visto afectados por la medida se solidarizan con sus 'compañeros'. «Son cosas de la política que nada tiene que ver con la realidad, se ha demostrado que la subida de los casos no tiene relación con la hostelería», comenta uno de los dueños de un bar situado en la parte de la capital leonesa.

Una paradoja que estará vigente al menos una semana, a partir de aquí se revisarán los datos de incidencia para determinar si León debe aplicar estas medidas y si San Andrés del Rabanedo tiene que seguir con las restricciones o se le levanta el 'castigo'.

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