Silván cree que «todo lo hecho hasta aquí vale y mucho» pero deja claro que «hay que mejorar» y escuchar «a la calle»

Silván se desplazó esta tarde hasta la sede del PP de Burgos para presentar su precandidatura y dejó claro que pueden confiar en Toño Silván porque cuidará sus intereses por encima de los sillones. Así, solicitó un PP más abierto, implicado , participativo y orgulloso de lo que es, adaptado a la sociedad del siglo XXI que impone obligaciones como estar más en la calle. Más calle y menos despacho, reiteró.

En declaraciones a los medios, acompañado del presidente del PP de Burgos, César Rico, y el secretario provincial Javier Lacalle, agradeció el apoyo a sus compañeros burgaleses, al tiempo que aprovechó su visita para dejar claro que viene a hablar de afiliado a afiliado y a pedir el voto de todos ellos.

Vengo a decirle al afiliado que él es el protagonista de este proceso, aseveró un Toño Silván que cree en la Comunidad y en un proyecto para Burgos y las ocho provincias restantes. Así, puso de manifiesto su confianza en un PP que tiene unas siglas que construyen y que tiene que ser consciente de que es necesaria más calle y menos despachos.

Quiero un partido abierto para que sea más participativo y no se tenga miedo al debate ni interno ni al debate con la sociedad, explicó en su turno de palabra tras haber pasado en los días anteriores por plazas como Salamanca y Zamora y dedicar la jornada del jueves a exponer su programa en Burgos y en Palencia.

Un partido «integrado»

En este sentido, se mostró partidario de dar más protagonismo al afiliado al que no se le puede llamar solo en campaña, sino que también tiene que colaborar el resto del año para poder enriquecer al partido. Una idea que entiende fundamental para que esas ideas de la calle se fundan en las de los dirigentes castellanos y leoneses.

Tenemos un valor innegable que es la capilaridad del PP de Castilla y León que está en todo el territorio, aseveró Siván que entiende que esa característica permite al PP ser potentes, no solo en fuerza, sino en ideas que deben retornar a ese punto de origen, que son los ciudadanos.

Además, puso de manifiesto que, pase lo que pase, el PP será un partido unido e integrado con el objetivo de trabajar por Castilla y León. De ahí que entienda que no se debe tener miedo ni al debate interno ni al debate con la sociedad.

Un partido del siglo XXI

En el momento de presentar sus argumentos, indicó que si es el próximo presidente del PP de Castilla y León aportará un PP del siglo XXI con contacto con la calle y con los ciudadanos, además de una gran fuerza e ilusión y ganas. He recibido la fuerza del afiliado y ellos nos dicen que esto tiene que cambiar. Todo lo hecho hasta aquí vale, pero hay que mejorar..., subrayó.

Del mismo modo, apeló a la normalidad y recordó que esta situación hace años hubiese sido impensable. Hoy lo hacemos con normalidad, porque todos nos conocemos y sabemos donde están unos y otros, expresó en relación a la presentación de precandidaturas por primera vez en la historia del PPCyL.

Cuotas lineales

En respuesta a los periodistas, destacó que uno de sus primeros compromisos si llega a suceder a Herrera será el de corregir las imperfecciones del sistema de cuotas del modo que se planteé un sistema de cuotas lineales porque es llamativo que haya diferencias en la cuota entre unas organizaciones provinciales y otras.

Por último, quiso tener unas palabras de agradecimiento con el todavía presidente del PP de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, al que recordó debérselo todo. De Juan Vicente Herrera digo que es mi amigo, mi jefe y es nuestro presidente y esa es la verdad que traslado. El posicionamiento que Herrera haya hecho a esta campaña es de máximo respeto, finalizó.