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A.C.
Miércoles, 16 de marzo 2016, 19:52
El Ayuntamiento de León ha abierto expediente disciplinario a los dos policías locales por los hechos acaecidos el pasado 25 de febrero consistentes en el acompañamiento de uniforme a la Audiencia Provincial a Raquel Gago, la agente culpable de un delito de encubrimiento en el ... crimen de la dirigente política Isabel Carrasco.
El expediente informativo concluye la presunta responsabilidad disciplinaria de los dos funcionarios
El instructor del expediente informativo considera que, con el fin de depurar si ha existido o no infracción y como garantía municipal en la defensa del interés general y de los funcionarios municipales que podrán ejercer sus derechos en un procedimiento reglado con pleno respeto a los derechos y a su defensa, se proceda a incoar el oportuno expediente disciplinario a los dos policías locales para esclarecer los hechos y determinar sus presuntas responsabilidades.
Previamente, el Ayuntamiento acuerdo iniciar un expediente informativo a los dos agentes al entender que su actitud no era por lo menos inapropiada e inadecuada. Es más, el edil de Policía, Fernando Salguero, rechazó la actitud de estos dos agentes. No la compartimos ni desde la Policía Local ni desde este Ayuntamiento. Para nada es una actitud adecuada.
Entre carantoñas y gestos de cariño y ánimo y bajo el objetivo de una docena de medios de comunicación, los dos agentes arroparon a Raquel Gago hasta las dependencias judiciales donde debía comparecer en una vista oral para resolver la solicitud de ingreso inmediato a prisión.
Encuentro casual
Un encuentro que, según remarcó al finalizar la vista oral el letrado Fermín Guerrero, fue casual pero que demuestra el cariño y el apoyo que está recibiendo Raquel en la calle porque son muchos los que consideran injusto el veredicto del jurado popular.
En ese momento, los agentes se encontraban vigilando el bolardo que regula la entrada a la plaza de San Isidoro cuando Raquel apareció acompañado del abogado. Fue en ese momento al ver a sus compañeros, cuando la agente no puedo evitar venirse abajo.
Fue en ese momento cuando los dos agentes decidieron arropar a Raquel hasta la Audiencia Provincial, quizá con una demostración excesiva de cariño, sin ser conscientes de que en ese momento estaban proyectando no la imagen de dos compañeros o amigos sino de toda la Policía Local.
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