Más de 170.000 leoneses se encontraba fuera de su área de residencia en verano, después del fin del estado de alarma

Este porcentaje cae hasta el 16,76 por ciento cuando el dato se eleva a toda la comunidad. En global, los españoles redujeron sus desplazamientos de vacaciones este verano un 20 por ciento, si bien la movilidad aumentó tras finalizar el estado de alarma de junio. Sin embargo, aún sigue por debajo de lo habitual.

Por provincias, el 18 de julio 46.680 abulenses fueron detectados en algún momento pernoctando en otra área, un 29 por ciento; 122.449 burgaleses, un 34,3 por ciento; 171.481 leoneses, un 37,2 por ciento; 56.767 palentinos, un 35,2 por ciento; 121.992 salmantinos, un 36,9 por ciento de la población total; 55.749 segovianos, un 36,4 por ciento; 20.202 sorianos, un 22,8 por ciento; 202.239 vallisoletanos, un 38,9 por ciento; y 52.878 zamoranos, un 30.65 por ciento.

El INE ha estudiado la movilidad cotidiana de los residentes en España desde el 24 de junio hasta hoy. Sus resultados apuntan a que, tras finalizar el primer estado de alarma el miércoles 24 de junio, el 19,4 por ciento de la población abandonó su área de residencia durante las horas centrales del día, posiblemente para ir a trabajar o a estudiar. Son casi diez puntos menos que en noviembre de 2019, antes de la pandemia, cuando este porcentaje era del 29,2 por ciento. Desde finales de junio de este año, el porcentaje de población que abandonó su área de residencia ha oscilado entre el 18,3 y el 22,2 por ciento para un día laborable en horario laboral. Ahora, en cambio, la tendencia es otra vez descendente.

Para poder facilitar la comparación y tener una referencia válida sobre hasta qué punto se debe considerar que la movilidad de la población ha variado, el INE establece como referencia los datos de un día de una semana que puede considerarse 'normal'. Para este estudio, ese día es el que resulta de la media del 18 al 21 de de noviembre de 2019.

En verano, el área del municipio cántabro de Noja, a 40 kilómetros de Santander, pasó de tener 6.407 residentes a 36.663 sólo en la noche del viernes 17 al sábado 18 de julio, siendo la zona que más población recibió de golpe en toda España respecto a la que tiene empadronada, posiblemente muchos de ellos procedentes de Castilla y León.

Las ciudades de más de 10.000 habitantes llegaron a tener en el mes de agosto en determinadas zonas un 25 por ciento menos de la población residente, sobre todo en Salamanca y León, además de Zaragoza y Valencia, así como en las provincias de Barcelona y Madrid.