La policía británica califica como «incidente terrorista» los apuñalamientos en el sur del país

El Policía regional de Thames Valley que inició la investigación del crimen ha dejado paso, a las 8.30 de la mañana, a detectives de unidades antiterroristas, después de que la investigación nocturna llevase a calificar el suceso como un «acto terrorista». Inicialmente, los portavoces policiales afirmaron que se mantenía «una mente abierta» sobre la motivación.

Neil Basu, de la Policía Metropolitana de Londres y director nacional de antiterrorismo, ha afirmado en un comunicado público que, aunque la investigación continúa en contacto con los servicios de inteligencia y la policía local, en este momento no se busca a nadie más ni se han identificado conexiones que presenten «una amenaza específica para la gente en lugares públicas o agrupada». Afirmó también que los investigadores están «muy lejos de conocer con seguridad» la motivación del asesino.

Testigos señalan que, poco después de las siete de la tarde, hora local, el joven irrumpió en el parque de Forbury Gardens, en el centro urbano de la ciudad, a una distancia de 40 kilómetros al oeste de Lndres, y acuchilló en el cuello y pecho a hombres de mediana edad que estaban juntos sentados en la hierba bebiendo cerveza. Cuando se produjo la huida generalizada por el pánico, el asesino se habría unido a la evasión. Un policía local desarmado lo redujo con un placaje de rugby y fue esposado en la carretera colindante al parque, con la ayuda de los ocupantes de un coche patrulla que había respondido a la alarma.

Policías armados entraron hacia las once de la noche, según la BBC, en un edificio de pisos en Basingstoke Road, en el sur de la ciudad atravesada por el Támesis. Los vecinos oyeron una explosión durante la requisa de un apartamento, que se debe probablemente a la destrucción de algún objeto sospechoso.

El suceso se produjo en un atardecer soleado del fin de la primavera, en Forbury Gardens, donde horas antes se habían congregado manifestantes del movimiento antiracista 'Black Lives Matter'. No existe conexión con lo ocurrido después, como se temió inicialmente, y la marcha, cuyos organizadores se habían coordinado con la Policía local, afirman que ya se habían disuelto cuando conocieron la noticia del acuchillamiento.

El primer mimistro, Boris Johnson, ha expresado que sus pensamientos «están con todos los afectados por el terrible incidente en Reading». Los servicios de emergencia recibieron llamadas telefónicas alertándoles del acuchillamiento y helicópteros-ambulancia aterrizaron rápidamente en un parque vecino. Un vídeo colgado en internet muestra a tres personas yaciendo en la hierba, ensangrentadas y asistidas por otros paseantes en el parque.

«El parque estaba lleno, mucha gente estaba sentada para tomar algo con los amigos cuando una persona llegó, se puso a gritar unas palabras ininteligibles de repente y fue hacia un grupo de una decena de personas, tratando de atacarlas con un cuchillo», declaró a la agencia británica PA Lawrence Wort, que presenció la escena.

«Apuñaló a tres de ellos, gravemente en el cuello y bajo los brazos, luego se volvió y empezó a correr hacia mí, nos dimos la vuelta y empezamos a correr», explicó Wort, entrenador deportivo de 20 años. «Cuando se dio cuenta de que no podía alcanzarnos, logró alcanzar a una persona por detrás del cuello y cuando vio que todo el mundo empezaba a correr, se fue del parque», contó.