El Eurogrupo llama a la calma: «Es un asunto interno de Italia»

El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, o el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, se han ceñido también al guión remarcando que se "trata de un asunto interno italiano" que nada tiene que ver con el euro. "Italia es un país sólido en el que tenemos confianza. Las reformas son importantes y hay que seguir con ellas. Necesitamos más integración, la respuesta es más Europa", ha recalcado el francés. Dijsselbloem, por su parte, ha recordado que la estructura del bloque común nada tiene que ver con la que existía en el epicentro de la crisis y que ahora es mucho más fuerte, sobre todo en lo referido al sector financiero. Un mensaje también recalcado por el francés, Michel Sapin.

En la misma línea se ha pronunciado el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble. "Italia necesita urgentemente un gobierno capaz de actuar y espero que continuará con las reformas a las que se comprometió", ha señalado, para añadir que "no hay razones para hablar de una crisis del euro".

Aunque el relato diseñado por el Eurogrupo busque llamar a la tranquilidad, cerrar filas con Italia y hacer como si no pasase nada, no hay que olvidar que se trata de la tercera potencia del euro y que el efecto contagio es evidente e incluso lógico, sobre todo porque hay una decena de bancos transalpinos en la cuerda floja con Monte Dei Paschi de Siena en situación crítica. Además, el país sigue creciendo por debajo del 1% y su deuda sigue anclada por encima del 130%. Italia es el problema.