La OTAN recuerda a Rusia que sus puertas siguen abiertas a Ucrania

El jefe del Gobierno de Kiev, por su parte, declaró que «desde 2014, cuando se inició la guerra, Rusia empuja a Ucrania hacia la OTAN y hoy está allanando el difícil camino de su adhesión». Zelenski lamentó las diferencias en el seno de la UE para acordar una respuesta común. «Queremos un formato de respuesta en el caso de que haya una escalada. Creemos que la mayoría de los líderes de la UE lo entiende, pero no estoy seguro de que todos los líderes lo entiendan de la misma manera», señaló.

Los países occidentales acusan a Rusia de preparar una nueva invasión a Ucrania y de apostar un considerable contingente en la frontera. El miércoles el Kremlin entregó una lista de exigencias de seguridad a la subsecretaria de Estado de EE UU para Europa, Karen Donfried, que se desplazó a Moscú. Donfried llegó ayer a Bruselas para presentar estas propuestas a la OTAN en una reunión con los embajadores de los países miembros. En 2008, se prometió una adhesión a Ucrania y a Georgia en una cumbre de la OTAN en Bucarest, pese a las advertencias de Francia y Alemania. Pero la entrada de un nuevo miembro debe ser aprobada por unanimidad, recordó Stoltenberg. «El agresor es Rusia», afirmó. «Fue Rusia quien usó la fuerza militar contra Ucrania, anexionó ilegalmente Crimea en 2014 y continúa desestabilizando el este del país», agregó.

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, quiere un diálogo directo con Washington sobre el pulso con Kiev y busca garantías de seguridad como una condición para rebajar las tensiones. Tanto Estados Unidos como la Unión Europea han advertido de que en el caso de una invasión van a imponer sanciones contundentes a Moscú.

De hecho, desde Bruselas, el Parlamento Europeo condenó este jueves la escalada militar rusa en la frontera con Ucrania y reclamó a la UE que esté lista para adoptar nuevos castigos. En su resolución, los eurodiputados defendieron las aspiraciones de Kiev de ingresar en la OTAN y señalaron que «ninguna nación debe estar sujeta a la aprobación de un tercer país a la hora de elegir sus alianzas». El texto contó con el voto en contra de la extrema derecha francesa y de la Izquierda, entre ellos los eurodiputados de Unidas Podemos.

Mientras, los militares ucranianos desplegados en el frente para combatir contra los separatistas prorrusos opinan que solamente una adhesión a la OTAN puede proteger a su país, ya que las advertencias de los occidentales sobre sanciones no frenarán las ambiciones del Kremlin.

Viktor, un veterano de infantería de 56 años, apostado en la localidad de Pisky, muy cerca de Donetsk, la 'capital' de los separatistas, no tiene dudas. «Ucrania debe unirse a la Alianza Atlántica. Si Rusia nos lanza un ataque, lo vamos a tener difícil para aguantar solos», estimó el soldado, con un kalashnikov al hombro.

También para Vladyslav, un joven soldado de 22 años, solo una entrada de Ucrania en la Alianza puede salvar al país. «Si Rusia, un agresor, invade nuestro territorio, entonces la familia de la OTAN debería ayudarnos con tropas y armamento», afirmó, protegido con un casco y un chaleco antibalas de color caqui. Un compañero de 45 años llamado Viktor estimó que las diversas sanciones contra Rusia son inútiles porque «no provocan daños considerables a la economía rusa», indicó.