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mikel ayestaran
Jerusalén
Miércoles, 13 de noviembre 2019, 22:20
La violencia reinó por segundo día en Gaza y la cifra de fallecidos alcanzó los 24, según fuentes hospitalarias palestinas, entre ellos tres niños. Yihad Islámica prosiguió en solitario con el lanzamiento de cohetes contra Israel, el número de proyectiles superó los 360, y el ... Ejército con los bombardeos contra esta facción palestina vinculada a Irán cuyo jefe militar, Baha Abu al-Ata, fue víctima de lo que Tel Aviv llama asesinato selectivo la madrugada del martes. Los colegios en Gaza y en el sur de Israel siguieron cerrados, en el lado hebreo no dejaron de sonar las sirenas en localidades próximas a la Franja y en El Cairo se intensificaron las reuniones para intentar rebajar la tensión.
«No atacamos a Hamás, el objetivo es Yihad Islámica y por eso evitamos blancos en la ciudad de Gaza. No queremos matar a civiles y dar excusas a Hamás para que se sume al combate», declaró el portavoz del Ejército, Hidai Zilberman. Según las fuerzas israelíes, gran parte de los muertos palestinos pertenecen al grupo armado al que responsabiliza de lanzar la mayoría de cohetes en los últimos meses.
El primer ministro en funciones, Benjamín Netanyahu, evitó responsabilizar a Hamás de la salida de cohetes de Gaza, como hace habitualmente, para centrar su discurso en Yihad Islámica. Con el asesinato de Abu al-Ata, Israel acaba con el cerebro militar de esta facción y rompe la unidad de acción entre los dos grupos que lideran la resistencia armada en Gaza desde 2008. Un precedente de cara al futuro.
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