Secciones
Servicios
Destacamos
COLPISA / AFP
Jueves, 19 de enero 2017, 17:55
Desde el Pentágono ya se preparan las opciones que serán presentadas a Donald Trump para acelerar la campaña militar contra el grupo Estado Islámico (EI), de acuerdo a los deseos que expresó el futuro presidente estadounidense durante su campaña electoral.
MÁS INFORMACIÓN
Trump prometió "bombardear a muerte" ... al llamado Daesh y afirmó tener un plan secreto para vencer rápidamente a los yihadistas. El presidente electo, que asumirá sus funciones el viernes, también dijo que después de su llegada al poder reunirá a sus principales generales y les dará "30 días para preparar un plan para vencer al grupo Estado Islámico".
Su futuro secretario de Defensa, el general James Mattis, confirmó la semana pasada durante su audiencia de confirmación ante el Senado tal voluntad presidencial de pisar el acelerador frente a los yihadistas. Interrogado sobre los esfuerzos actuales de la coalición internacional para retomar Raqa, bastión sirio de los yihadistas, Mattis explicó que la estrategia será "reexaminada, quizás para hacerla más enérgica, con intercambios más ambiciosos".
Un responsable estadounidense de Defensa, interrogado por la agencia de noticias AFP y bajo anonimato, no excluyó que sean enviados a Siria soldados adicionales. Unos 500 militares de las fuerzas especiales estadounidenses ya están aconsejando a los grupos armados sirios, en particular las Fuerzas Democráticas sirias (FDS), una coalición arabo-kurda dominada por las milicias kurdas YPG.
Más de 80 combatientes del Estado Islámico, incluidos supuestos implicados en atentados en Europa, murieron en ataques aéreos de Estados Unidos a campos de entrenamiento en Libia, según informó este mismo jueves el propio Pentágono.
"Ciertamente eran personas que estaban tramando operaciones europeas y podrían también estar relacionadas con algunos ataques que ya ocurrieron en Europa", comentó el jefe del Pentágono, el general Ashton Carter.
"Tenemos que golpear a Estado Islámico en todas las partes donde aparezca. Y eso es especialmente cierto dado el hecho de que sabemos que algunos operativos de Estado Islámico en Libia estuvieron implicados en la planificación de ataques", añadió Carter.
El portavoz del Pentágono, Peter Cook, ha confirmado los ataques y ha señalado como objetivo a milicianos que "huían desde Sirte a campamentos en el desierto para reorganizarse". Estos terroristas, ha añadido, "representan una amenaza para la seguridad de Libia, la región y los intereses nacionales de EE UU".
Pero persiste la duda sobre la capacidad de las FDS para retomar Raqa, teniendo en cuenta que el ataque final deberá ser coordinado exclusivamente por su brazo árabe en una ciudad predominantemente árabe. Sin embargo, este brazo árabe sigue siendo fortalecido por las fuerzas especiales estadounidenses, que además les proveen equipamiento y formación.
Para Turquía, miembro crucial de la coalición, las FDS no son más que una tapadera de las milicias kurdas YPG, consideradas por ese país como un "grupo terrorista". "Lo realmente importante es discutir ante todo lo que hacemos actualmente, porqué lo hacemos, lo que podríamos hacer y porqué no lo hicimos hasta ahora", declaró a periodistas el miércoles el general Joe Dunford, jefe del Estado Mayor Conjunto de EE UU.
Desde agosto de 2014
La campaña militar contra el Daesh empezó en agosto de 2014 con ataques aéreos estadounidenses. De a poco, EE UU armó una coalición internacional que lleva a cabo ataques aéreos. Forma y aconseja a fuerzas iraquíes y a las sirias antiyihadistas pero no participa directamente en ataques terrestres.
Algunos militares criticaron en privado la prudencia de la administración Obama, que aumentó muy de a poco su esfuerzo militar contra los yihadistas, y se quejaron de tener que dedicar demasiado tiempo a convencer a la Casa Blanca en vez de dirigir a sus tropas. Ahora, piden más poder y libertad para desplegar a sus hombres o a sus herramientas militares.
En una entrevista al diario USA Today a principios de enero, el general David Goldfein, jefe de la US Air Force, dejó entender que los jefes militares deseaban, en particular, mayor margen de maniobra para emplear las competencias de ataque informático y las herramientas espaciales del Pentágono.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.