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efe
Jueves, 21 de abril 2016, 13:32
El ministro sirio de Exteriores, Walid al Mualem, ha acusado a la oposición siria de boicotear las conversaciones de paz en Ginebra y optar por la vía militar, según declaraciones recogidas por los medios oficiales sirios. En Ginebra "han quedado al descubierto las posiciones de ... los opositores, como en el caso de la delegación de Riad, que quiso sabotear las conversaciones y mostró su preferencia por la escalada militar", dijo Al Mualem.
La oposición siria asegura que solo ha suspendido su participación y no ha boicoteado las negociaciones de paz que auspicia la ONU en Ginebra, al tiempo que denuncia el aumento de los ataques de las tropas del régimen en Siria. En una reunión en Damasco con el enviado especial de China para el conflicto sirio, Xie Xiaoyan, el jefe de la diplomacia siria subrayó además que su Gobierno "continuará la guerra contra el terrorismo en paralelo con el proceso político en Ginebra".
Al Mualem indicó que esa lucha es "contra el Estado Islámico (EI), el Frente al Nusra y el resto de grupos terroristas", sin nombrar a los últimos. El EI y el Frente al Nusra -filial siria de Al-Qaida- están excluidos del alto el fuego que entró en vigor el pasado 27 de febrero y cuyas recientes violaciones están haciendo tambalear el proceso de paz.
Reproches a Turquía
Respecto a los terroristas, Al Mualem acusó a Turquía de seguir respaldándolos al "facilitar su cruce (por la frontera) y el suministro de armas para que abran nuevos frentes de batalla". "Este asunto requiere una postura internacional para respetar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU relacionadas con la lucha antiterrorista", agregó.
Por su parte, el enviado de China expresó su respaldo a la restauración de la seguridad y la estabilidad en Siria y al diálogo que se celebra en Ginebra, según la agencia estatal Sana. Xie comenzó hoy en Siria una gira que le llevará también a Arabia Saudí, Irán y Rusia, los países con más influencia en los bandos en conflicto. Pekín se ha alineado en los últimos años con Rusia en el conflicto, primero vetando la aprobación de sanciones de la ONU contra el régimen de Bachar al Asad y más tarde manifestando su apoyo a las operaciones militares rusas en suelo sirio.
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