Borrar
Francia Márquez, el hito político con el que vibra Colombia

Francia Márquez, el hito político con el que vibra Colombia

La vicepresidenta de la candidatura de Gustavo Petro a dirigir el país es una defensora de los derechos humanos, feminista y luchadora ambiental que se convertido en la estrella de la campaña electoral

Dagoberto Escorcia

Domingo, 8 de mayo 2022, 00:24

Desde que emergió con fuerza en la política, y de eso no hace más que unos cinco meses, Francia Elena Márquez Mina ha recibido varias amenazas de muerte por parte de grupos armados, y hasta el mismo presidente del Senado la ha acusado de guerrillera. Francia Márquez (01/09/1981) se ha convertido en el hito político del momento en Colombia, país que el próximo 29 de mayo está convocado a las urnas para elegir un nuevo mandatario. Ella es la fórmula vicepresidencial del candidato de la izquierda, Gustavo Petro, al que las encuestas sitúan como gran favorito para gobernar el país los próximos cuatro años.

Ella es afrocolombiana, nacida en una población llamada Suárez, en la región del Cauca. Reconoce que en su época juvenil sentía vergüenza de ser una mujer negra porque, según dice, «nadie quiere ser heredero de un esclavo». Hasta quería alisarse el pelo y parecer una blanca. Pero también soñaba con ser cantora y bailar danza: «Tenía un espíritu alborotado», asegura esta hija de una familia humilde, de madre partera y padre obrero.

Francia asombró al mundo político colombiano cuando el pasado 13 de marzo, en la consulta para elegir candidatos, sin ocupar ningún cargo público y con apenas tres meses en campaña, obtuvo el segundo puesto de la coalición Pacto Histórico, liderada por Petro, con más votos (783.000) que otros candidatos con años de experiencia en política. Madre de dos hijos, Francia es una clara defensora de los derechos humanos, feminista, luchadora ambiental que fue galardonada en el 2018 con el premio Goldman Environmental por su lucha bajo amenazas paramilitares contra la minería ilegal que pretendía desviar el río Ovejas y desalojar a toda la comunidad que vivía en la zona.

Marcha hasta Bogotá

Entonces ella ya no quería dejar de ser negra. Todo lo contrario. Había visto la injusticia y sufrido la violencia contra la población indígena. Oyendo a los mayores de la comunidad aprendió a identificarse con ellos y adoptó sus discursos. Se lanzó en una campaña que la llevó a organizar una marcha hasta Bogotá con un grupo de mujeres para exigir al Gobierno que suspendiera los títulos que «alguien» había vendido a una empresa canadiense para la explotación de la minería, afectara el ecosistema del río y desalojara a la comunidad del territorio. «El río no se vende» y «De aquí nos sacan muertos» fueron los principales lemas izados en la protesta.

Convertida el pasado 13 de marzo en la voz de 783.000 colombianos y en la posible vicepresidenta del Gobierno de Petro, Francia Márquez no ha tenido pelos en la lengua para decir «las cosas de frente», mostrarse retadora ante los adversarios, calificar a Colombia de ser un país clasista, racista y machista, invitar a las mujeres a salir adelante, que no las sigan viendo como el sexo débil, y tener la esperanza de cambiar el país para «lograr la paz, la justicia social, erradicar el racismo estructural y el patriarcado que nos hace daño».

En uno de sus primeros discursos públicos, Francia Márquez, la mujer que necesitó casi diez años para obtener el título de abogada por la falta de recursos económicos para pagar la universidad, habló de «las mayoras y mayores», de «los nadies y las nadies», palabras que le causaron algunos insultos en las redes sociales. «Para su información mayoras y mayores, y nadies y nadias son mujeres y hombres sabios que tienen la autoridad ética y moral para guiar el rumbo de nuestro pueblo. Siento mucho que para ustedes el único lenguaje correcto sea el heredero de la colonia», espetó sin rubor reclamando un reconocimiento de la sabiduría ancestral.

Francia Márquez se ha convertido en todo un fenómeno político en Colombia. No era mediática y ahora lo es. Cuenta con 410.000 seguidores en Twitter y 355.000 en Instagram, en los que destacan su lema de Cambio por la vida y el hashtag de VamosAVivirSabroso. Es auténtica y representa, junto a Gustavo Petro, una suave brisa de cambio en un país que vive con una herida abierta provocada por la violencia y la corrupción política. Ella es una líder social de verdad que lleva muchos años luchando porque se valore más la fuerza cultural de los pueblos indígenas y de la población afrocolombiana.

Agenda para la igualdad

Ella se ve ganadora hasta el punto que asegura que cuando entre en el Gobierno tendrá una agenda para la igualdad con cinco puntos esenciales: Igualdad de las mujeres con el resto de la sociedad, en materia de tener los mismos derechos para participar en política, el mismo salario de los hombres y acceso a la educación. «Somos mayoría, el 52% de la población colombiana, pero vivimos en minoría», dice. Igualdad en las diversidades sexuales y de género LGTBI+ para garantizar su seguridad: «Si las mujeres sufrimos esta comunidad, más», asegura. Igualdad para los jóvenes que les permita realizar sus sueños y fortalecer sus agendas. Igualdad para la población raizal, la que vive la mayor desigualdad. Y finalmente en su programa buscará cerrar las brechas de inequidad de los territorios históricamente excluidos.

Francia Márquez no es una mentira más, es de verdad. Es una líder con un potencial tremendo, aseguran algunos analistas. Otros creen que es odiada por la derecha, en un odio de clase y racismo. Y una buena mayoría la ven ya como una ganadora. Puede ser vicepresidenta si las elecciones las gana Gustavo Petro, y representante en la Cámara, si las pierde, al mismo tiempo que portavoz de mujeres, negros, pobres y ambientalistas.

Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

leonoticias Francia Márquez, el hito político con el que vibra Colombia