96 detenidos y 255 coches quemados en Francia en la noche de la fiesta nacional

Se han registrado 255 vehículos quemados, lo que supone un descenso del 40% con respecto a 2022, en el que incendiaron 423 coches. La Policía detuvo a 96 personas. Siete policías, gendarmes y bomberos resultaron heridos anoche, frente a 21 el año pasado, según el balance provisional del ministerio del Interior.

«Las fiestas populares, los conciertos y los fuegos artificiales han podido celebrarse por toda Francia con una baja importante de daños con respecto a 2022. Se lo debemos a nuestras fuerzas de orden, a su presencia y a los numerosos controles preventivos efectuados. Gracias a ellos», escribió en Twitter el ministro del Interior, Gérald Darmanin.

Al igual que ocurre en Nochevieja, las celebraciones del 14 de julio suelen estar marcadas en Francia por la violencia urbana. Pero este año el Gobierno temía que fuera aún peor tras los recientes disturbios.

En vísperas de la fiesta nacional, el Ejecutivo de Macron prohibió la venta, transporte y utilización de artículos pirotécnicos y de fuegos artificiales en el conjunto del territorio nacional hasta el 15 de junio incluido, con la excepción de los profesionales. También reforzaron los controles en las fronteras para evitar el contrabando de morteros pirotécnicos, así como su envío clandestino por correo.

Durante las noches de violencia urbana, los alborotadores suelen tirar morteros pirotécnicos contra los agentes. Anoche, a las fuerzas del orden les dispararon 51 tiros de morteros pirotécnicos, frente a 333 en 2022.