Nuevo golpe de Ucrania a las reservas de petróleo rusas

Dos depósitos de petróleo se incendiaron en Rusia durante la noche del jueves al viernes, uno en la región de Vorónezh y otro en la de Perm. Según el gobernador de Vorónezh, Alexánder Gúsev, el primer depósito ha ardido en la localidad de Anna y «los bomberos se encuentran sobre el terreno. No ha habido víctimas». Poco después, ha añadido que las llamas habían sido extinguidas. Los aparatos aéreos no tripulados disparados por Ucrania, añadió Gúsev, «fueron neutralizados con sistemas de guerra electrónica, pero uno de ellos cayó sobre la planta, encima de una cisterna vacía».

El Estado Mayor del ejército ucraniano confirmó las informaciones del gobernador ruso señalando que «esta noche se llevó a cabo un ataque contra los depósitos de Annanefteprodukt, cerca del pueblo de Anna. Se registró actividad de defensa aérea en el área de la instalación y se confirmó un impacto en al menos uno de los tanques verticales. Comenzó un incendio. Se están aclarando los daños causados».

Se ha registrado también un incendio en una instalación petrolera de la empresa Lukoil en la región rusa de Perm. El Ministerio para las Situaciones de Emergencia (MChS, Protección Civil) señala en un parte que «en la zona industrial del pueblo de Osentsi está en llamas una planta de almacenamiento de productos petrolíferos. El incendio, que se extiende en una superficie de de 20.000 metros cuadrados, ha destruido los contendores de combustible». El ministerio asegura que «los bomberos no permitieron que el fuego se propagase a edificios de viviendas y administrativos y a la vegetación seca. En su extinción participan más de 60 personas y 19 vehículos». Osentsi se encuentra al sur de la ciudad de Perm, cerca del aeropuerto de Bolshoye Sávino, en una zona dentro del alcance de los drones ucranianos, aunque nadie ha confirmado todavía que la causa del siniestro haya sido un bombardeo, algo que dan por seguro algunos canales de Telegram, en donde se están difundiendo vídeos de las llamas en las centrales siniestradas, tanto de Perm como de Vorónezh.

El Ministerio de Defensa ruso informa en su parte matinal que la defensa antiaérea derribó durante la noche un total de 18 drones ucranianos sobre las regiones de Bélgorod, Vorónezh, Rostov del Don y el mar de Azov, pero nada dice de lo sucedido en Perm.

Desde principios de 2024, los drones ucranianos atacan periódicamente refinerías y depósitos de carburante rusos en distintas regiones, según la BBC, en un total 64 ocasiones desde enero. Los ataques más devastadores se produjeron, en agosto, contra la planta del distrito de Proletarski, en la región de Rostov del Don, en donde no pudieron apagar el incendio durante más de dos semanas, y, a comienzos de septiembre, contra la refinaría de combustible de Kapótniya, la más importante de Moscú y unas de las más grandes del país.

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha venido advirtiendo que tales bombardeos son la respuesta a los ataques de las tropas rusas contra las instalaciones energéticas en Ucrania. Este viernes, precisamente, la Fuerza Aérea ucraniana dio cuenta de un ataque ruso durante la noche con 19 drones contra «infraestructura crítica» del país. Según el parte, las defensas antiaéreas «derribaron nueve drones, y siete más probablemente resultaron afectados por interferencias electrónicas, señala el informe sin aclarar qué sucedió con los otros tres aparatos rusos no tripulados.

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