Secciones
Servicios
Destacamos
Colpisa / AFP
Madrid
Sábado, 15 de julio 2017, 11:58
China incineró este sábado con gran discreción a Liu Xiaobo, disidente político y premio Nobel de la Paz en 2010, tras una ceremonia sencilla celebrada lejos de los medios y en presencia de su viuda, cuyo futuro sigue siendo incierto.
Los restos del disidente fueron ... cremados "conforme a la voluntad de los miembros de su familia" en Shenyang (al noreste de China), donde Liu Xiaobo se encontraba hospitalizado hasta su fallecimiento el jueves pasado; así lo anunció en rueda de prensa Zhang Qingyang, portavoz del gobierno de la ciudad.
El Ejecutivo chino difundió fotos mostrando a la viuda, con gafas oscuras y llorando ante el cuerpo de su marido rodeado de flores blancas en la funeraria. Así, estaba acompañada por otros allegados del que fuese ganador de un premio Nobel.
El portavoz negó que se hubiera producido la menor precipitación en la incineración del cuerpo. Según él, la ceremonia se celebró "de conformidad con las tradiciones del norte de China, que prevén una cremación y un servicio funerario en los tres días posteriores a la muerte".
Detenido durante más de ocho años por subversión, el opositor político falleció a los 61 años a causa de un cáncer de hígado, el cual estaba en fase terminal. Había sido puesto en libertad condicional en el hospital de Shenyang, en el noreste del país, pero el gobierno de Pekín rechazó liberarlo para que fuera tratado en el extranjero, como se había solicitado con vehemencia desde los países occidentales.
Las cenizas fueron esparcidas en el mar según comentó su hermano mayor, Liu Xiaoguang. Liu Xiaobo es el primer nobel de la Paz que fallece estando detenido desde un pacifista alemán encarcelado por los nazis y muerto en 1938. El comité de este prestigioso premio acusó al Ejecutivo de Pekín de acarrear con una "pesada responsabilidad" en su deceso.
Tras la muerte del disidente, las miradas se vuelven ahora hacia su mujer Liu Xia, en arresto domiciliario desde 2010. La expoetisa y fotógrafa fue autorizada a visitar a su esposo en el hospital antes de su fallecimiento, pero sus contactos con el mundo exterior son muy limitados.
"Hasta donde yo sé, la señora Liu Xia es libre. Es preferible para ella que no reciba demasiadas solicitaciones exteriores durante este período de duelo. Es el deseo de la familia", afirmó el propio Zhang Qingyang ante los periodistas. "El mundo debe movilizarse para salvarla y rápidamente", dijo el pasado viernes el abogado de Liu Xiaobo en Estados Unidos, Jared Genser. "Ella merece vivir el resto de sus días fuera de China (...) en paz y tranquilidad", aseveró.
Las condiciones del fallecimiento de Liu Xiaobo fueron criticadas por varios países que habían reiterado su petición para que pudiera ser tratado en el extranjero. El Gobierno chino protestó de manera oficial ante EE UU, Alemania y Francia en las Naciones Unidas, alegando que eran injerencias en los asuntos internos del país.
"Occidente utiliza a Liu Xiaobo como una carta en su juego contra China", denunció este mismo sábado el diario chino Global Times, conocido por su tono crítico y nacionalista, como cuando ya había descrito al disidente como "paranoico, ingenuo y arrogante".
Liu Xiaobo, escritor y profesor, fue condenado en 2009 a 11 años de reclusión por subversión tras haber reclamado reformas democráticas. Es uno de los autores de un osado manifiesto, la Carta 08, que pedía elecciones libres.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Los Reyes, en el estand de Cantabria en Fitur
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.