Corea del Norte anuncia que realizará «pronto» pruebas nucleares y de misiles

El joven dictador, que ha insistido en esta amenaza desde hace semanas, dio instrucciones "a las secciones relevantes para hacer los preparativos hasta el último detalle" durante una reunión con científicos y técnicos de la industria militar del país.

En su visita a las instalaciones militares, indicó la agencia, Kim presenció una prueba de resistencia térmica de las ojivas de los misiles intercontinentales norcoreanos, supuestamente preparadas para portar explosivos atómicos.

El "líder supremo" de Corea del Norte también apostó por "mejorar aún más la eficacia de la capacidad de ataque nuclear" del Ejército Popular, según el comunicado.

Aunque Pyongyang ha declarado en varias ocasiones su intención de seguir realizando ensayos nucleares y de misiles como los llevados a cabo en enero y febrero respectivamente, se trata de la primera vez desde entonces que anuncia públicamente que lo hará "pronto".

Aunque el país comunista asegura poseer misiles con carga atómica, expertos internacionales han puesto en duda que cuente con la tecnología necesaria para miniaturizar ojivas nucleares.

Corea del Norte ha intensificado su retórica belicista y las exhibiciones militares desde la adopción de nuevas sanciones internacionales contra el país como respuesta a su prueba nuclear del 6 de enero y el lanzamiento de un cohete espacial, el 7 de febrero, considerado un ensayo de misiles encubierto.

Por su parte, en la vecina Corea del Sur el Gobierno insistió hoy de nuevo en que el Norte prepara algún tipo de "provocación" armada cerca de la frontera y que planea enviar drones -probablemente de espionaje- al país vecino, según informó el Ministerio de Defensa a diputados de la Asamblea Nacional (Parlamento) de Seúl.

Defensa también acusa a Pyongyang de haber ensayado ataques a instalaciones con una maqueta de la capital surcoreana, según reveló un diputado a la agencia de noticias Yonhap.

Mientras, Corea del Sur y Estados Unidos realizan estos días las mayores maniobras conjuntas de su historia en suelo surcoreano, en las que participan más de 17.000 tropas estadounidenses y 300.000 del país asiático.

Corea del Norte considera estas maniobras un "ensayo de invasión" de su país, por lo que ha respondido con duras amenazas bélicas y el lanzamiento de misiles al mar como demostración de fuerza militar.