Detenido un hombre en Alemania por supuestos vínculos terroristas

El ministro principal de Brandemburgo, Dietmar Woidke, ha contado incluso que la Policía creía que el sospechoso "planeaba un acto terrorista" con un trasfondo islamista durante las fiestas de Eisenhuettenstadt, que se celebran entre el 26 y el 28 de agosto.

La ciudad alemana, situada a 120 kilómetros de Berlín, cerca de la frontera con Polonia, acoge el principal centro de procesamiento de refugiados de Brandemburgo. Los ataques xenófobos han aumentado en el último año en Alemania tras la masiva llegada de solicitantes de asilo.

Sin embargo, un portavoz policial, citado por la cadena Deutsche Welle, ha aclarado en una rueda de prensa posterior que solo han hallado material pirotécnico y que "las sospechas" sobre los planes del detenido de llevar a cabo un atentado islamista "no se han confirmado".

El jefe de la Policía de Brandemburgo, Hans Juergen Moerke, ha vuelto a corregir las declaraciones anteriores y ha subrayado que no hay que descartar los nexos terroristas del detenido, de acuerdo con la cadena RBB.

"No lo han traído los refugiados"

Por su parte, la canciller, Angela Merkel, ha insistido este miércoles en desvincular a los refugiados del terrorismo. "El fenómeno del terrorismo islamista no lo han traído los refugiados", ha dicho en un acto electoral celebrado en el estado de Mecklenburg-Vorpommern de cara a los comicios regionales del 4 de septiembre.

La jefa de Gobierno ha reiterado igualmente que el islam tampoco está vinculado necesariamente al terrorismo. "Ya hemos dicho que el islam que se practica en el marco de la Constitución forma parte de Alemania", ha afirmado.

La popularidad de Merkel se ha visto afectada por la llegada masiva de refugiados a Alemania procedentes de las guerras en Siria e Irak, que la ultraderecha ha relacionado con los atentados que se han producido en julio en el país.

Cadena de atentados

Alemania está en alerta tras la serie de atentados perpetrados el mes pasado, los primeros de carácter islamista en suelo alemán. En las últimas semanas se han producido varias detenciones de personas supuestamente implicadas en nuevos ataques terroristas.

La ola de atentados comenzó el pasado 18 de julio, cuando un adolescente paquistaní atacó con un hacha y un cuchillo un tren regional en las proximidades de Wuezburgo, dejando cuatro heridos de gravedad y uno de carácter leve.

Apenas cuatro días después un joven iraní protagonizó un tiroteo en un centro comercial de Munich. Tras varias horas de tensión en las que la capital bávara estuvo en alerta, el único atacante fue hallado muerto en las inmediaciones del complejo.

El 24 de julio, un sirio cuya petición de asilo había sido rechazada y estaba a la espera de ser deportado a Bulgaria murió en un fallido atentado suicida durante un festival de música celebrado en la ciudad bávara de Ansbach.