Los nietos de la Duquesa de Alba celebrarán su puesta de largo en el País Vasco

El protocolo indica que la puesta de largo es la presentación en sociedad de los jóvenes que cumplen su mayoría de edad y que van a participar de forma activa en ella. Este tipo de celebraciones son poco habituales en la sociedad actual, pero aún hay familias de clase alta a las que les gusta mantener esta tradición.

Luis y Amina, los mellizos de Cayetano Martínez de Irujo y Genoveva Casanova cumplieron 18 años este 25 de julio pero su fiesta de entrada en sociedad se celebrará a principios de septiembre en el palacio de Arbaisenea tal y como han informado recientemente el portal online Vanitatis.

La fiesta será familiar con presencia de amigos de los mellizos y se podrá disfrutar de música en directo. El código de vestuario para los asistentes a una puesta de largo suele ser clásico y elegante. Luis y Amina Martínez de Irujo han pasado mucho veranos en San Sebastián en compañía de sus padres tal y como su madre ha mostrado en redes sociales.

Los jóvenes acaban de regresar de un viaje de Interrail que les ha llevado hasta Grecia donde han coincidido con Victoria Federica Marichalar, hija de la infanta Elena, de quien son amigos y que es probable que acuda a la puesta de largo. Su prima Tana Rivera, la hija de Eugenia Martínez de Irujo, también asistirá a la elegante cita en palacio de Arbaisenea. Ella hace un año también celebró está presentación oficial en la finca sevillana 'La Pizana' propiedad de su madre.

Es probable que toda la familia se aloje en el palacio de Arbaisenea, a la que acuden todos los veranos el propio Cayetano Martínez de Irujo junto a su exmujer Genoveva Casanova en compañía de sus hijos Luis y Amina. La casa perteneció a la duquesa de Alba y veraneó en la capital donostiarra durante 68 años de forma ininterrumpida. En el año 2012 demostró su conocimiento de la cultura guipucoana cantando el himno de San Ignacio en euskera en el programa 'Contigo en la Playa' que entonces se emitía en la desaparecida emisora Punto Radio Gipuzkoa.

Tras la muerte de la duquesa de Alba 20 de noviembre de 2014, a los 88 años, en el reparto de la herencia su hijo menor Cayetano Martínez de Irujo, duque de Arjona, heredó el palacio de Arbaisenea. Recientemente Cayetano Martínez de Irujo mostraba en el programa de TVE 'Lazos de Sangre' el interior del palacio que en la actualidad se alquilan sus jardines para la celebración de eventos y bodas. En dicho reportaje el duque de Anjou señaló que, «la casa está tal y como la dejo mi madre. Sus camisones aún están en el armario».

Arbaisenea fue primero la casa de los suegros de la duquesa de Alba, luego perteneció a su primer marido, Luis Martínez de Irujo hasta su prematura muerte en 1972, a los 52 años como consecuencia de una leucemia. La duquesa heredó una parte de la finca y luego adquirió a los hermanos de su esposo la totalidad de la propiedad. «Arbaisenea me encanta», señalaba siempre que tenía ocasión la desaparecida jefa de la Casa de Alba. La finca constituye uno de los últimos ejemplos de las residencias veraniegas que edificaron a fines del siglo XIX las grandes familias de la aristocracia en San Sebastián. Se levanta sobre una colina desde la que se divisa buena parte de la ciudad, incluida la bahía de La Concha. La casa, que pretendía ser un tanto exótica y lejana del bullicio de la ciudad, es exquisita en su conjunto, y vive encerrada en un parque de más de quince hectáreas de jardín paisajista, rodeada del arbolado propio de la región, y paseos enmarcados entre setos de hortensias.

En 2015, el hijo menor de la duquesa y propietario del palacio decidió alquilar la finca para la celebración de bodas y eventos exclusivos.

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