pedro MUñoz
Viernes, 31 de enero 2020, 12:54
«Estamos completamente devastados por la repentina pérdida de mi adorable marido, Kobe –el increíble padre de nuestros hijos– y mi hermosa y dulce Gianna –una cariñosa, pensativa y maravillosa hija, y maravillosa hermana de Natalia, Bianka y Capri». Las primeras palabras de la viuda ... de Kobe Bryant, Vanessa, hablan por sí solas y ponen fin a cuatro días de silencio tratando de digerir la tragedia familiar.
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Vanessa Bryant (37 años) utilizó la red Instagram para enviar un largo parlamento de agradecimientos acompañado de una foto familiar en la que se ve a la pareja y a sus cuatro hijas sonrientes y relajados en un entorno familiar. Antes de este réquiem digital, había cambiado la foto de su cuenta por una imagen de su hija y su marido fallecidos.
Convertida en la 'viuda de América', por la influencia planetaria del jugador en el mundo del deporte, Vanessa confiesa que «es imposible imaginar la vida sin ellos». La inconsolable madre y esposa dice «no encontrar palabras para describir nuestro dolor». Para tranquilidad de todos los que están pendientes de su estado anímico, insiste en que busca consuelo al «saber que Kobe y Gigi sabían que eran muy queridos (...) Fueron una hermosa bendición que nos han arrebatado demasiado pronto».
Vanessa se reconoce incapaz de pensar «qué será de nuestras vidas después de hoy». Reitera su incapacidad de «imaginar la vida sin ellos», pero, en un tono con atisbos de esperanza también para su legión de seguidores, asegura que «nos levantaremos cada día tratando de seguir adelante porque Kobe y nuestra pequeña Gigi nos iluminan el camino».
Tampoco olvida a las otras cuatro familias que perdieron a alguno de sus integrantes en el accidente de helicóptero que se saldó con nueve víctimas mortales en la mañana del pasado domingo. La viuda Bryant se reconoce «destrozada» cuando recuerda al entrenador John Altobelli, su esposa, Keri, y la hija de ambos y compañera de equipo de Gigi, Alyssa (13 años). También recuerda a Sarah Chester y su hija, Peyton (también de 13); Christina Mauser, asistente de Kobe, y, por último, al piloto habitual del baloncestista, Ara Zobayan.
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Su equipo de siempre, los Lakers de Los Ángeles, vuelve hoy a la realidad de la competición frente a Porland Trail Blazers. Un partido en el Staples Center, la pista donde jugó toda su carrera, y que servirá para un nuevo homenaje a la estrella desaparecida.
«Queremos representar lo que Kobe era más que nada», resumió Frank Vogel, el entrenador de los Lakers. «Siempre hemos querido que se sienta orgulloso y eso no va a cambiar», explicó el preparador, que ha dedicado estos días a levantar el ánimo psicológico de sus jugadores. «Esto ha fortalecido lo que hemos sentido (...), nos hemos convertido en una familia en muy poco tiempo».
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Pero no todo ha sido luto y apoyo. El cómico Ari Shaffir publicó un vídeo en Twitter en el que llamaba a Bryant «violador» y lamentaba que hubiera muerto «23 años tarde». Su mal gusto llega al extremo de gritar «¡Olé para el héroe que olvidó poner gasolina al helicóptero! Odio a los Lakers. ¡Qué gran día!». A pesar de que Shaffir trató de borrar el vídeo, ya era tarde. Ha recibido amenazas de muerte y ha sido despedido por la agencia que le representaba.
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